Una veintena de colectivos navarros hicieron público ayer su rechazo a los presupuestos presentados por el Gobierno navarro, «unos presupuestos de vergüenza, que no deben aprobarse por ser antisociales y negativos para el progreso social, cultural y medio ambiental de Navarra».

LAB, ESK, STEE-EILAS y CGT, AHT Gelditu Elkarlana, Plataforma de la Ribera más centrales no, Aroztegia eta gero zer?, Larra-Belagoa, Emakume Internazionalistak, Bilgune Feminista, Ikasle Abertzaleak, Sasoiak, AEKko irakasleok, Sortzen, Colectivo Lurra, Bardenas Ya, Arga Bizirik, Sakana Bizirik y Nafarroa Bizirik nahi dugu criticaron que el Ejecutivo navarro -«amigo del cemento, las grandes compañías energéticas o automovilísticas y enemigo del euskara y la cultura popular»- pretende salir de la crisis «estrujando el bolsillo a la gente trabajadora».

Pérdidas de ingresos

Por ello, han convocado una manifestación para el próximo sábado a las 18.00 desde la antigua estación de autobuses de Iruñea contra los recortes presupuestarios.

Destacaron que las cuentas del Gobierno navarro recortan en un 39,33% la recaudación del Impuesto de Sociedades, dejando de ingresar más de 180 millones de euros y que, a través del Convenio con el Estado español, Nafarroa pierde otros 541,7 millones de euros para sufragar los gastos del Ejército, la Casa Real española o la Guardia Civil. A la vez, señalaron que se recortan los gastos para las necesidades de los municipios mientras «crecen de manera espectacular» macro infraestructuras como la autovía de Logroño o el Tren de Alta Velocidad.

Sin embargo, la partida de servicios sociales y promoción social se recorta en un 5%. Ayudas a la conciliación, implantación del ciclo 0-3 años, escuelas de música, ikastolas, euskara, sanidad o lucha contra la pobreza son las partidas que pagan estos recortes. Frente a este modelo, defendieron «unos presupuestos elaborados de forma más sostenible, sin tanto cemento, consumismo y polución; más amable, sin tanto recorte social, sin tanto policía y militar; más cercana, protegiendo y mimando nuestra cultura en armonía con las que nos llegan de otros pueblos y más moderna, cuidando nuestra sanidad y nuestra educación públicas».

Asimismo, exigieron que la crisis se resuelva con el esfuerzo de quienes la han provocado.