Venancio Fontaneda Saez, ex trabajador autónomo de Getxo, falleció ayer a consecuencia de un mesotelioma pleural. Falleció a los 70 años, después de haber trabajado en una parte de su vida en el montaje de diferentes empresas siderúrgicas, siempre en contacto con el amianto, según recordaron sus familiares.

Con ese fallecido, suman ya, al menos, 22 muertos en 2010, cuatro más que el año anterior, cuando murieron 18 trabajadores por haberse infectado por el amianto. Estos son datos que dieron a conocer ayer CCOO y la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviamie), que celebró en Bilbo una asamblea de socios.

En ese encuentro realizaron un seguimiento de las actividades que han desarrollado durante este año que finaliza. Sobre 2010, valoraron de forma positiva la presentación de la película «La plaza de la Música», del realizador donostiarra Juanmi Gutiérrez, debido a que ha llevado a primer plano de actualidad la dura realidad que sufren aquellos trabajadores que se han contagiado de las fibras de amianto.

Entre las carencias, explicaron que no se ha puesto en marcha del Fondo de Compensación Económica para los trabajadores del amianto, con el que, apostillaron, «no tendríamos que ir de juicio en juicio reclamando la falta de seguridad y prevención que atravesamos en nuestro trabajo».