Comida navideña con los medios
Pachi Izco defiende a capa y espada la labor de Camacho
Sostiene que la entidad navarra sigue siendo un club de cantera y solicita que El Sadar vuelva a animar.
Natxo MATXIN
No venía al caso porque de todos es sabida la protección a ultranza del presidente rojillo, Pachi Izco, respecto de su actual técnico, José Antonio Camacho, pero quizás por la cada vez mayor oposición que hay en el entorno rojillo a la gestión del preparador murciano, el máximo dirigente osasunista insistió en su defensa a capa y espada.
«Es, hoy por hoy, el mejor entrenador posible para Osasuna. Los resultados le avalan -señaló en su alegato posterior a la tradicional comida navideña con la prensa-. Cuando un club modesto hace una apuesta por un entrenador, debe mantenerla a muerte mientras los resultados sean buenos. Lo contrario sería un suicidio deportivo, los modestos no pueden tomar riesgos innecesarios».
Pese a tal declaración de intenciones -no hubo la misma paciencia en anteriores precedentes-, Izco fue incapaz de confirmar si Camacho continuará la próxima temporada. «¿Quién me garantiza que yo vaya a ser el presidente de Osasuna la próxima temporada?», se escapó por la tangente, a sabiendas que le quedarían tres años más de mandatos.
Pero el tema del entrenador no es el único espinoso en la actualidad rojilla. La cantera, o mejor dicho su escasa participación, también está en boca de todos. Izco destacó que su situación «es muy buena, aunque se intenten hacer lecturas partidistas». La tozuda realidad es que en el último encuentro disputado en El Sadar jugaron dos futbolistas salidos de Tajonar.
El máximo dirigente osasunista no quiso perder la ocasión para exponer su opinión sobre un tercer aspecto candente: el divorcio entre la afición más animosa y el tándem técnico-presidente. «Nos gustaría que se animase mucho más y se insultara menos. No es un achaque ni una crítica, es sólo la petición de un osasunista», al que le encantaría que el estadio iruindarra »recupere ese ambiente y ese empuje que tantos puntos ha dejado en Pamplona a lo largo de la historia».
Mercado invernal
Como la actualidad manda, a Izco no le quedó otro remedio que hacer frente a los rumores del mercado invernal, que hablan de la posible salida de dos titulares, Nekounam y Juanfran, lo que dejaría muy mermada a la escuadra navarra, conocida la escasa capacidad económica de Osasuna para encontrar reemplazos de garantías.
El iraní lanzó un ultimátum al club en una entrevista publicada ayer por «Diario de Noticias», en la que solicitaba una inmediata renovación, o bien su traspaso estas Navidades. El futbolista, concentrado con su selección junto con Masoud llegó a hablar de que el encuentro frente al Zaragoza pudo ser el último con la elástica rojilla. «Le ofrecimos renovar en mayo pasado, pero no la contempló. Ahora es muy libre de expresar su parecer del modo que quiera», indicó Izco, sin confirmar que se vaya a repetir la oferta, presumiblemente a la baja.
De quien sí se espera prolongue su contrato es Natxo Monreal. «Es mi intuición y deseo», manifestó, mientras que en el caso de Juanfran, el máximo mandatario rojillo confirmó que «ha habido acercamientos y contactos» con el Atlético, «pero no una oferta seria» que culmine el traspaso.
Como casi siempre que las cosas no van muy bien, Izco realizó un llamamiento a los medios para «ayudar» a mejorar el actual ambiente de El Sadar. Pese a ello, aseguró que los gritos en su contra «ni me pesan ni me influyen».
En un primer momento, Izco reflejó que no había leído las críticas vertidas hacia su gestión por parte de la plataforma «Todos somos Osasuna». Sin embargo, casi a renglón seguido, echó mano de un papel que tenía guardado y en el que había anotado toda una serie de contestaciones.
Preguntado Izco por las quejas merengues sobre los arbitrajes y, en especial, las de su técnico, se descolgó con un «lo que diga Mourinho me la refanfinfla». Añadió, asimismo, que le daba «risa» que un club como el Real Madrid exhibiera un listado con los fallos del trencilla.
Osasuna regresará en horario nocturno a la competición liguera una vez finalizadas las vacaciones navideñas de la plantilla rojilla. Así, los de Camacho jugarán el domingo, 2 de enero, a las 20.00 en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla, en un partido tradicionalmente caliente.
El buen momento que vive el Promesas -quinto empatado a puntos con el Real Unión, en puestos de promoción- dio pie a especular con la posibilidad de un ascenso a Segunda A. «Ojalá, porque sería menos costoso, ya que habría dos millones y pico de ingresos por televisión».