OBITUARIO
Seleccionador, más que ninguna otra cosa
Miguel CABANILLAS (EFE) |
El ex entrenador Enzo Bearzot, fallecido el lunes por la noche en Milán, deja tras de sí el recuerdo de una Italia campeona, la selección absoluta que él mismo dirigió en el Mundial España'82 y que consiguió para el fútbol italiano la tercera de sus cuatro Copas del Mundo.
Bearzot se marcha tras una larga enfermedad con el récord de partidos de un seleccionador italiano (104) aún en su haber, por delante del legendario Vittorio Pozzo (97), entrenador de Italia durante los años 30 y 40 y artífice de los primeros Mundiales de la Azzurra (1934 y 1938).
La historia de éxitos del ex técnico italiano, quien fue jugador del Inter de Milán y, sobre todo, del Torino, está estrechamente ligada al banquillo de la selección absoluta, después de una carrera como centrocampista más bien discreta que comenzó en los años 40 en el equipo de su ciudad natal. Y fue en el Torino donde comenzó su carrera como entrenador en 1964. Más tarde comenzaría a trabajar para la Federación Italiana, primero como seleccionador sub23 y como técnico del primer equipo a partir de 1975.
Tras unos años con Fulvio Bernardini, sus mayores éxitos llegarían en el Mundial de Argentina'78, un cuarto puesto con un equipo lleno de jóvenes, y ganando la final de Madrid ante Alemania (3-1). Un Mundial, el de 1982, que en Italia todavía se recuerda como «el más bonito».