Un tribunal moscovita condenó ayer a trece años y medio de prisión al ex empresario petrolero Mijail Jodorkovski y a su socio, Platon Lebedev, por malversación de bienes de la empresa petrolera Yukos y por blanqueo de dinero.

Aunque la nueva pena cuenta a partir del comienzo de este procesamiento, en 2007, se incluirá como tiempo de prisión los ochos años a los que fueron condenados en 2003 por una causa anterior y cuya conclusión está prevista para 2011. Por ello, los dos condenados deberían salir de la cárcel en 2017, según informó RIA Novosti.

La Fiscalía rusa había pedido una pena de 14 años de prisión para ambos inculpados por el robo de 218 millones de toneladas de crudo por valor de 27.000 millones de dólares a su propia petrolera privada, Yukos, y de blanqueo de dinero, delitos de los que los acusados se declararon inocentes.

Nada más finalizado el juicio, los abogados de ambos empresarios anunciaron que recurrirán la condena, pero que sus defendidos no pedirán clemencia.

«No es una sentencia, es una arbitrariedad», aseguró a la prensa el letrado Yuri Shmidt, quien destacó que el juez Danilkin actuó «presionado por las autoridades, que están interesadas en que Jodorkovski no salga en libertad».

La sentencia provocó indignación entre los defensores de los derechos humanos.

«Es una sentencia injusta y sin sentido, que denigra a nuestro país, a nuestras autoridades y a nuestro sistema judicial, que no dictaría semejante sentencia si fuera independiente», lamentó Ludmila Alexéyeva, líder del Grupo de Helsinki de Moscú.

«Esta sentencia no condena sólo a Jodorkovski sino a todo el sistema judicial y, al mismo tiempo, al régimen político que se ha establecido en el país», declaró el líder del movimiento por los derechos humanos, Lev Ponomariov.