Mohammed Daraghme, de 21 años, murió ayer al ser disparado por un soldado israelí en el control de Hamra, cerca de Nablús, según indicó un responsable de los servicios de seguridad palestinos.

Se trata de la segunda víctima mortal palestina de 2011, después de que el sábado muriera Jawaher Abú Rahmah como consecuencia de la inhalación del gas lacrimógeno lanzado contra una protesta en Bi'lin.

Daraghme, originario de Tubas, se dirigía a una colonia sionista para trabajar y no estaba armada. Recibió tres balazos y falleció inmediatamente.

Una portavoz del Ejército israelí explicó que Daraghme «se acercó al control con una botella en la mano y los soldados probablemente temieron que les pudiera golpear».

«Suponemos que los soldados habrían realizado disparos de advertencia y que el sospechoso habría seguido avanzando», añadió esta portavoz.

El FDLP, formación izquierdista a la que pertenecía Daraghme, acusó al Ejército israelí de «asesinarle a sangre fría».

La Autoridad Palestina denunció ayer la «peligrosa escalada» del Ejército israelí que «busca destruir cualquier esperanza de un proceso de paz».

«Pedimos a la Administración estadounidense y a la comunidad internacional que tomen las medidas necesarias para detener esta escalada», declaró Nabil Abú Rudeina, portavoz de la Autoridad Palestina.