Es sabido por toda la sociedad el trabajo hecho (o no hecho) por la Consejería de Educación durante el primer trimestre del curso 2010-2011. Debemos añadir a esto el retraso acumulado en los cursos anteriores, que nos han traído a la situación actual. Analicemos las asignaturas trimestrales pendientes:

Tareas para casa: no ha acertado ni una previsión. Hace las cosas, si las hace, a última hora (todavía estamos a la espera del instituto de la zona norte de Iruñea), así como de otras obras y trabajos, (además de hastiados de los barracones), y cambia las decisiones de un día para otro, muestra de su improvisación (claro ejemplo es el caso del instituto de Mendillorri).

Matemáticas: un instituto está hecho para 400 personas y ahora hay 542. Teniendo en cuenta que 53 terminarán Bachiller y entrarán 134 nuevos alumnos y alumnas en primero de la ESO, ¿Para cuándo un nuevo instituto? El Departamento de Educación es incapaz de resolver este simple problema matemático.

Euskara: lleva años socavando las bases del modelo de inmersión. No garantiza centros completamente euskaldunes, introduciendo personal no vascopar- lante. Las actividades extraescolares son cada vez más escasas, siendo el ocio generalmente en otros idiomas (los dibujos animados de la ETB3 son imprescindibles). Se le quitan horas lectivas al euskara, poniendo en riesgo la recuperación del mismo. A esto hay que añadir la vulneración de derechos que supone la zonificación lingüística.

Ciencias Sociales: si se le quita la ayuda al alumnado con necesidades especiales, ¿dónde queda la igualdad de oportunidades? Ya ha dimitido más de una dirección del CREENA por falta de medios. A ello hay que añadir la reducción de PTs y logopedas y recortes de plantillas en general. Por ahorrar un puñado de euros retrasa al máximo las sustituciones, negando a la sociedad la educación pública de calidad que se merece.

Ciencias Naturales: apuesta por cerrar escuelas rurales y unificar al alumnado en concentraciones. El mantenimiento de las escuelas rurales es vital para la el desarrollo de estas zonas. ¿Irá a más el cierre de las escuelas rurales con el nuevo mapa escolar?

Educación Física: algunos espacios no cumplen la normativa, en otros centros deben dar más de la mitad de las clases fuera del instituto y las nuevas construcciones no responden a las necesidades reales de los centros.

Atención Educativa: se imponen decretos, se realizan planes de convivencia, pero no se garantiza la participación de toda la comunidad escolar, marginando a la mayoría (padres, madres y alumnado). Además, se confeccionan planes de igualdad para los cuáles no se ponen medidas de desarrollo, mientras se subvencionan los centros que segregan por sexos, reforzando las bases de la sociedad patriarcal. Huelga decir que el tratamiento de las diferentes opciones sexuales se hace desde un punto de vista cerrado y retrógrado.

Inglés: lo quieren convertir en el tótem de la sociedad actual, contraponiéndolo al euskara. No se puede negar la necesidad del mismo, pero sin olvidar que la mejor metodología para adquirirlo es reforzando el actual modelo de inmersión en euskara, que facilita el aprendizaje de éste y otros idiomas. La base debe ser el euskara.

Informática: se van a gastar 3 millones de euros en pizarras digitales pero no se efectúa la formación necesaria ni se garantiza el mantenimiento para rentabilizar la inversión al 100%. En las escuelas rurales siguen con problemas ya que el programa Educa no está adaptado a las necesidades y realidades de estas escuelas.

Enseñanzas artísticas: se tratan como enseñanzas de segunda clase, en las cuáles no se invierte ni la atención ni los medios necesarios. Siguiendo los esquemas del capitalismo estas enseñanzas no son imprescindibles.

A pesar de que el Departamento de Educación va muy retrasado, tiene la posibilidad de darle la vuelta a la situación en los próximos presupuestos y garantizar la enseñanza pública de calidad y en euskara que le demanda la sociedad. Esto es lo que debe hacer en las diferentes materias para conseguir el aprobado en las siguientes evaluaciones.

Tareas para casa: realizar una planificación que cubriendo las necesidades, garantice una educación euskaldun pública y de calidad durante los próximos años. Esto se tendrá que reflejar en los presupuestos.

Matemáticas: que no intenten meter dos litros en botellas de uno, y eviten los macrocentros que van en contra de la calidad. Sabiendo las previsiones, que se construyan nuevos centros donde son necesarios respondiendo a las necesidades locales.

Euskara: reforzar y defender las bases del éxito del modelo de inmersión. Es decir, centros totalmente euskaldunes desde el transporte hasta el comedor, teniendo en cuenta también a los/las conserjes. Mantener las horas que el euskara necesita, así una vez aprendido interiorizarán y aprenderán más fácilmente otros idiomas. Dar facilidades al ocio y medios de comunicación euskaldunes.

Ciencias Sociales: dar el tratamiento que merecen a las personas con necesidades especiales, poniendo en marcha nuevas políticas para los trabajadores, ya sea en plantilla o en sustituciones.

Ciencias Naturales: desechar las concentraciones en la elaboración del nuevo mapa escolar, manteniendo vivos los pueblos y barrios y escapando de actitudes meramente economicistas.

Educación Física: mucho necesita correr el Departamento de Educación para alejarse de la dejadez de los últimos años y ponerse en forma. Urgen nuevos centros para el próximo curso.

Atención Educativa: fomentar la participación democrática de toda la comunidad educativa. Por otro lado, hay que alejarse de planes publicitarios y dar pasos reales en el desarrollo de la coeducación.

Inglés: dejar de lado la guerra lingüística y fomentar el verdadero TIL, es decir, el modelo D, que trata las lenguas de una manera realmente integral.

Informática: además de recursos materiales, garantizar la formación y mantenimiento necesarios para el uso adecuado de los mismos.

Enseñanzas artísticas: estos estudios son necesarios para que los y las estudiantes sean personas creativas, libres y críticas, por ello hay que darles la importancia que merecen.