El Lietuvos Rytas es, por nombre y por clasificación en la fase anterior, el rival más débil del grupo, pero es un equipo que, tras comenzar la fase regular con cuatro derrotas consecutivas, se ha colado en el Top-16 con tres victorias en los últimos tres partidos, entre ellos una ante el Barcelona, lo que habla de su potencial.

Lo malo para los campeones lituanos es que en esa reacción tuvo un peso importante Sarunas Jasikevicius, que recaló en el equipo que se formó tras quedarse sin equipo al salir de Panathinaikos y cuya gran labor le ha llevado a fichar por Fenerbahçe. Su aportación al equipo de Vilnius ha sido mucho mayor que los 7.3 puntos y 4.3 asistencias que reflejan sus estadísticas. Su complemento en la dirección es el anotador Khalid El Amin, que está rayando a gran altura en su primera temporada en la Euroliga, con 11,4 puntos y 3,2 asistencias.

La siempre prolífica cantera lituana también aporta dos perlas a seguir muy de cerca, el completísimo escolta Martynas Gegevicius -pretendido por Unicaja- y el jovencísimo pívot Jonas Valanciunas, llamado a ser un interior dominante en el continente. Milko Bjelica es otro jugador determinante y que ya está empezando a suscitar el interés de los grandes.