CICLOCROSS Campeonatos de España
«Larri» grita por tercera vez
El vasco logró su tercer título consecutivo por saber esperar y aprovechar su momento para batir a Hermida.Unai IRARAGORRI | ZAMORA
Como siempre, Javier Ruiz de Larrinaga supo esperar su momento para atacar y ganar su tercero oro consecutivo en el Campeonato de España de ciclocross, disputado ayer en Zamora. Ganador en Valladolid en 2009 y en Laredo en 2010, el ciclista alavés no había rendido como se esperaba en las carreras precedentes, pero en el momento crucial supo responder y encadenar su tercer título consecutivo. La cruz para los vascos fue la caída de Egoitz Murgotio cuando era líder para terminar en una amarga novena plaza.
Tres oros. Y tres gritos de Ruiz de Larrinaga. En Valladolid por estrenarse y recoger la senda de David Seco, que, por cierto, ayer se despidió siendo el rey de la especialidad con seis títulos; en Laredo por la confirmación y demostrar que no era casualidad; y en Zamora por reivindicarse después de no llegar como el gran favorito.
Ruiz de Larrinaga cruzó la meta bajo la lluvia, con la boca abierta y extasiado tras un nuevo duelo contra el catalán José Antonio Hermida, campeón del mundo de BTT y que volvió a ser el rival más fuerte del ciclista vasco. Una tormenta que no empañó un triunfo indiscutible. De experiencia y veterano.
Menos explosivo que otros candidatos, el de Ametzaga de Zuia dejó hacer al principio. Su objetivo era doble, no perder la estela de los primeros y, sobre todo, no caerse o cometer un error. Pronto, la carrera seleccionó a los tres aspirantes al oro, el cántabro Suárez y los dos vascos Murgoitio y Ruiz de Larrinaga, mientras que por detrás Hermida no perdía el tiempo y remontaba rápidamente desde el puesto 49 de la salida.
La amenaza del campeón en 2007 y 2008 se cernía sobre los tres grandes especialistas. Murgoitio no quería esperar a nadie y tomó las riendas. Fuerte, tensó y sus rivales trataban de no perder su rueda. Tanto, que Suárez le rozó por detrás y el abadiñarra se fue al suelo y se dio un fuerte golpe en el hombro. Dolorido, se aupó a la bicicleta, pero era tarde. Quedaba eliminado y volvía a decir adiós a su anhelo de sumar su primer oro.
A Ruiz de Larrinaga le quedaba un rival menos. Y pronto cayó otro. Suárez sufrió un pinchazo -hasta un total de tres- y el alavés se quedó solo, aunque en la muy peligrosa compañía de Hermida.
El biker catalán, que apenas ha competido este año en el barro por celebrar su título de campeón del mundo de BTT no tenía nada que perder. Imprimió un ritmo elevado y por momentos Ruiz de Larrinaga parecía ceder. Sólo parecía. Con inteligencia y fuerza, y mucho tesón, la mala suerte de sus rivales le había aupado a una posición inmejorable para lograr el triplete. Y no lo quería desaprovechar.
Sólo tenía un obstáculo que superar, Hermida, y, al igual que en Laredo el año pasado, supo jugársela y atacar en el instante idóneo para conseguir una mínima renta pero suficiente para volver a gritar de rabia en la línea de meta. Por dos segundos tras casi una hora trepidante y las pulsaciones y el latido a mil. Dos segundos, una hora y un año más de campeón. Hermida se veía otra vez derrotado y protestó en meta por no haber oído la campana de la última vuelta. En cualquier caso, segundo, y con Suárez, tercero, de nuevo en el podio, tras superar la resistencia del siempre combativo Zaballa.
Hasta la quinta posición logró remontar Murgoitio, sin duda, le sabía a poco porque su única aspiración era el oro y finalmente cayó hasta la novena plaza, con un debutante en estas lides, Aitor Hernández, décimo. Y en su último Campeonato de España, Seco no pasó desapercibido y se despidió sobre el barro tras marcar una época con seis títulos, récord igualado con José Luis Talamillo, y al que ahora aspira Ruiz de Larrinaga.
«La suerte ha sido lo más importante de este campeonato», reconocía Larrinaga poco después de la ceremonia de podio. «Era una carrera de no cometer errores y he tenido la oportunidad de demostrar todo mi nivel de este año mientras otros, como Suárez o Murgoitio, han tenido muchos problemas. La gente me había descartado quizás de la victoria y en ese sentido me he podido aprovechar de que la vigilancia estaba sobre otros para poder ir más suelto en carrera», aseguró.
«Yo sabía que Hermida acabaría llegando antes o después. Me beneficiaba y podía preocupar a Suárez y Murgoitio. Ha sido un momento muy confuso, con el pinchazo de Isaac, la caída de Egoitz... Sólo quedaba esperar y apretar al final para intentar conseguir este triunfo», explicó.
Murgoitio se lamentaba. «Parezco gafado en el Campeonato de España. Cuando no es una cosa es otra. Iba a pasar la zona embarrada y Suárez me ha tocado un poco por detrás y he dado de lleno con el hombro izquierdo en el árbol. Me encontraba muy bien y trataba de controlar a Hermida que era el rival más temido», resumió.
GARA
La selección vasca ganó dos medallas más, Lastra, plata, en juveniles, por detrás del gallego Pablo Rodríguez, y Corrales, bronce en cadete, con victoria del madrileño Aguado. En total, seis metales: un oro, cuatro platas y un bronce.