Época de rebajas en los comercios pero no en San Mamés, donde se apuesta por las novedades. Relativas, porque el Athletic conoce de sobra la sensación de ganar -sobre todo en San Mamés-, pero novedades a fin de cuentas, no en vano no lo ha hecho aún en 2011. El triunfo, además y aunque habrá que esperar la ayuda de terceros, puede reportarle otra experiencia novedosa, la de otear por fin la clasificación desde puestos europeos; único objetivo que le queda al equipo tras la eliminación copera.

Los datos invitan al optimismo. Pese a que los bilbainos estrenaron el año dándosela ante el Deportivo en San Mamés, el equipo de zona media-baja de la tabla da el perfil exacto de víctima rojiblanca en la Catedral. Le va como un guante al Racing, que no sólo es de los que tienen como referencia los puestos de descenso, sino que llega a Bilbo como el tercer peor visitante de la Liga. Claro que su única victoria lejos de Santander la ha conseguido ante uno de los equipos que, precisamente, preceden al Athletic en la tabla, el Mallorca. Y que el aumento de motivación que experimentan los verdiblancos en cuanto cogen el autobús rumbo a Bilbo ya ha propiciado más de un disgusto a su anfitrión. Pero siempre es posible encontrar argumentos a favor del rival, que en nada deberían afectar a un equipo que quiere regresar a Europa.

La principal preocupación de Joaquín Caparrós, de hecho, se refiere al Athletic. Y más concretamente a su concentración defensiva. Los rojiblancos protagonizaron dos ejercicios perfectos de seriedad en su eliminatoria copera frente al Barcelona pero, precisa y llamativamente, su visita al Camp Nou ha sido el único de sus siete últimos compromisos oficiales en el que han sido capaces de dejar a cero la portería. «El partido debe ser parecido al del Depor en cuanto a ocasiones de gol, pero tenemos que mejorar en contundencia defensiva -subrayó Caparrós-. Este equipo genera ocasiones y mete goles; y no hay que perder eso, pero sí mantener un equilibrio».

Un reto en el que hoy participará la sexta pareja de centrales que alinea Caparrós desde que comenzó la temporada: Borja Ekiza, que debutó hace una semana en Málaga, y Aitor Ocio, que se quedó fuera del once en La Rosaleda tras su gran actuación frente al Barça. Mikel San José seguirá el choque desde la grada, Amorebieta desde la enfermería y a Ustaritz le tocará hacerlo esta vez desde el banquillo. Susaeta, Toquero -que ni siquiera viajaron la semana pasada- y Gurpegi regresarán, por su parte, al equipo titular.