El presidente de BBK, Mario Fernández, explicó ayer que la actualización del valor de los activos de la antigua CajaSur ha aflorado un resultado negativo de 1.100 millones de euros en 2010, aunque aseguró que la nueva entidad entrará en beneficios este año «con toda seguridad».

Fernández, que ayer visitó por primera vez Córdoba desde que CajaSur se transformó en el banco del grupo BBK el pasado 1 de enero, sostuvo en rueda de prensa recogida por Efe que la entidad vizcaina ha acometido una operación de «prudencia contable» -a la que además obliga la ley- por la que se han actualizado los activos recibidos, y señaló que «eso no tiene nada que ver con pérdidas de negocio».

BBK, explicó, ha realizado esta operación de saneamiento para evitar que las cuentas de resultados del futuro de BBK Bank CajaSur queden contaminadas por el pasado. «No habría sido nada prudente haber recibido activos, créditos e inmuebles, sin haberlos ajustado al valor que les corresponde el día que los recibimos», señaló. En su esfuerzo por hacer entender que esta actualización de activos que ha arrojado un resultado negativo de 1.100 millones de euros no se trata de pérdidas, puso un ejemplo: «Imaginemos que tenemos un terreno valorado en un millón de euros cuando su valor real es de 200.000 euros. Si no hubiéramos actualizado la valoración habría que reflejar esos 800.000 euros en la próxima cuenta de resultados».

De este modo, apostilló, las cuentas de 2011 ya no se encontrarán con las trabas de años anteriores en cuanto a deterioros de activos.

El objetivo marcado para el nuevo BBK Bank CajaSur es que se convierta en la primera entidad financiera de Andalucía.