El fallo judicial a favor de un embargado suscita aplausos pero también incertidumbre
Un deudor navarro saldará su crédito hipotecario con el BBVA con la entrega de las llaves de la vivienda, y no deberá abonar los 28.000 euros de más que le reclamaba el banco. Lo dice un fallo judicial que abre la puerta a miles de casos similares sujetos a embargos.Joseba VIVANCO |
Casarse con el banco. Es lo que, como miles y miles de ciudadanos, hicieron José Antonio Langarita y Mª Luisa Reche. En marzo de 2006 compraron una vivienda en Arroniz, por la que pagaban una hipoteca mensual de 450 euros. Pero en 2009, dejaron de hacer frente al pago. El suyo sería otro dramático daño colateral más de la crisis económica: en Nafarroa, cada día de 2010 dos familias perdieron su casa por no poder afrontar la hipoteca. A diferencia de José Antonio, todos ellos son vivencias anónimas, pero igual de angustiosas. Para ellos y muchos miles más, el caso de este navarro de 47 años ha abierto un rayo de esperanza: la Audiencia Provincial de Navarra ha emitido el primer dictamen judicial en el Estado español por el que considera suficiente la entrega de la vivienda al banco para saldar la deuda hipotecaria.
El teléfono de José Antonio no dejó ayer de sonar. En Internet se le calificaba de «héroe» o de «David pudo con Goliat». El fallo judicial a su favor y en contra del todopoderoso BBVA se propagó por medios de comunicación y páginas y foros de la Red. ¿Qué podía decir él? Pues mostrar su alegría por haberse `ahorrado' 28.000 euros -de los que 8.000 correspondían a intereses y gastos, para saldar la deuda de más de 70.000 euros- que el banco le reclamaba, al margen de la vivienda devuelta. Pero la `revolucionaria' sentencia no ha dejado indiferente a nadie. Ni a quienes la aplauden, ni, menos aún, a quienes la critican: el sector financiero.
¿Sentencia ética?
El tribunal navarro sentencia que el BBVA ha de aceptar la llamada dación en pago, ya que -he aquí otro de los argumentos relevantes- es «moralmente rechazable» que quien ha causado la crisis alegue que la vivienda se ha depreciado para reclamar la diferencia. Se acusa directamente al sistema financiero de haber creado esta delicada situación económica. Según la jueza, con devolver la vivienda al banco es suficiente para saldar su deuda (dación en pago), y no tiene que seguir pagando la diferencia entre el valor obtenido en la subasta y el total del préstamo firmado en su día.
En otros países, como en Estados Unidos, cuando un cliente no puede hacer frente a la hipoteca, el banco se queda con la vivienda y la deuda entre la entidad bancaria y el hipotecado queda zanjada. La legislación española, sin embargo, es muy distinta y ni siquiera el Gobierno Zapatero se ha mostrado favorable a modificar esa ley.
Huelga decir que las asociaciones de consumidores o plataformas ciudadanas surgidas al amparo de estos impagos de hipotecas han mostrado su satisfacción y esperan que el ejemplo cale. No parece que el fallo judicial vaya a sentar jurisprudencia, pero sí abre la puerta a miles y miles de casos similares para acudir ante un juez.
Según explicó la asociación OCU, representante legal del hipotecado, este auto supone una decisión «pionera» y permite introducir la figura de la dación en pago. Un auténtico `boquete' en el sistema hipotecario que ha puesto en alerta a quienes prestan ese dinero. A bote pronto parece toda una victoria de los consumidores frente al sistema bancario, pero éste ya ha anunciado que no se quedará de brazos cruzados.
Más allá del recurso que pueda presentar el BBVA, la asociación española de la banca ha avisado de que si se legalizase este mecanismo de la dación en pago provocaría «una dificultad mayor en el acceso al crédito, que sería más escaso y caro». Santos González, presidente de la misma, señaló que si se generaliza la fórmula de cancelar la hipoteca cediendo el inmueble al banco traería como consecuencia que «el volúmen de crédito se reduciría y se restringiría, porque en términos de mercado no sería gratis ni inocuo implantar esta medida».
Algunos analistas incluso observan el hipotético paso de encarecer los créditos como una fórmula para que las familias sepan realmente el riesgo que supone una hipoteca hoy.
El endeudado compró la casa en 2006 en Arroniz, dejó de pagar en 2009 por falta de fondos y entregó las llaves al banco en 2010. Pero la entidad financiera le reclamó 28.000 euros más.
Un tribunal navarro sentencia que BBVA ha de aceptar la dación en pago, una figura por la que se devuelve el bien hipotecado ante la imposibilidad de cumplir una obligación, en este caso el pago de la hipoteca.