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«De manera abstracta, trato de realizar poemas cinematográficos»

 
Sébastien Lifshitz

Director de cine

Tras ser descubierto por el gran público por «Presque rien» en el año 2000 y rodar «La Traversée» (2001) y «Wild Side» (2004), que fue Premio del Jurado Teddy en la Berlinale, «Plein Sud», que se proyectará hoy en Zinegoak, es la última obra del director de cinematografía francés.

El artista francés Sébastien Lifshitz presenta estos días su tercer largometraje de ficción, «Plein Sud» -una road movie con final en Tutera proyectado en la sección Panorama de la última Berlinale-, en el festival Zinegoak de Bilbo, donde se podrá ver hoy a las 17.30 en los cines Golem de Alhóndiga.

Háblenos de su última obra, «Plein Sud».

El filme es una road movie que cuenta como protagonista con un chico que viaja en pos de su madre, de la que fue separada hace muchos años, en una travesía que compartirá a través de un verano con tres chicos más, que le son desconocidos y a los que irá conociendo a lo largo del viaje.

Un viaje que comienza en el Estado francés y que termina en Tutera.

Sí, el rodaje ha contado con tres principales escenarios. El viaje comienza al norte [del Estado francés], en Normandía, después se desplaza hasta Bourdeaux para finalizar en Tudela. Un largo recorrido que implicaba trasladar a todo el equipo de rodaje y que, gracias a la diversidad del paisaje que en él hemos encontrado, ha sido muy excitante... sobre todo en el desierto cerca de Tudela [habla de Bardeak].

Variedad de paisaje para una historia que se desarrolla en la carretera, en un espacio inconcreto...

La película es muy atemporal, por lo que no queríamos mostrar un paisaje contemporáneo y concreto, sino uno mucho más abstracto, la carretera, la playa, el desierto...

... y en el que la luz y los cuerpos cobran un sentido especial como elementos narrativos.

Es cierto que en mi filmografía pongo especial énfasis en los elementos que citas, sí. Quizá porque para mí el lenguaje corporal es muy importante y mi intención es contar historias sinceras con un tratamiento más abstracto, no de manera clara y precisa, no de manera tradicional sino de manera poética. Trato de que mis obras sean poemas cinematográficos.

«Plein Sud» ha sido proyectada en Berlín.

En la Berlinale, especialmente en la sección Panorama, se muestran obras muy independientes. Me gustan este tipo de selecciones, porque es como un laboratorio donde puedes ver mucha diversidad, por lo que estoy muy contento de haber estado en Berlín. Además, tras mostrar allí mi anterior obra, «Wild Side», el público poco a poco va conociendo mi filmografía.

Ahora llega a Zinegoak. ¿Qué opina de festivales de temática LGBT?

Vivimos un periodo difícil, muy «tradicional», especialmente en Francia donde tenemos un gobierno muy conservador. La mentalidad de la gente, probablemente por la crisis, no es muy abierta. Y este tipo de festivales son muy necesarios porque son los únicos espacios donde puedes ver otro tipo de cine, otras realidades... aire fresco. Necesitamos luchar para mostrar, sobre todo a las nuevas generaciones, que la sociedad no se representa solo con el cine estadounidense. Debería ser parte de nuestra educación.

Además de para participar en Zinegoak, ¿para qué aprovechará su estancia en Bilbo?

No lo sé, para ver buenas películas y por supuesto, para acudir al Guggenheim. Estuve hace tres años y quiero volver. Pero sobre todo estoy muy contento de poder conocer a Roberto Castón. No lo conozco personalmente, pero he visto su película «Ander» y me ha encantado. A. B.

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