Ha llegado el punto de no retorno. La plana mayor de EA compareció en Iruñea para ratificarse en su decisión de no aceptar las «cláusulas ad hoc» que sus socios le impusieron para presentarse bajo el paraguas de la marca NaBai a las elecciones de mayo, porque pasan por renegar de sus acuerdos nacionales con la izquierda abertzale.

Pello Urizar y Maiorga Ramírez, secretario general del partido y su máximo responsable en Nafarroa, respectivamente, intentaron abrir una nueva vía de entendimiento. Pidieron a PNV, Aralar y los independientes que paralicen «inmediatamente» el proceso de elección de candidatos de NaBai como muestra de «su disposición a dialogar». Poco después, Txentxo Jiménez cerró de un portazo las posibilidades de acuerdo. El coordinador de Aralar en Nafarroa dijo que NaBai ya está conformada y que si alguien no firma el contrato, no estará, dejando claro que no pararán la maquinaria electoral.

«No hay marcha atrás», corroboró José Ángel Agirrebengoa, el líder del PNV navarro. La decisión de imponer una renuncia expresa a los pactos con la izquierda abertzale en Nafarroa «es unánime» para el burukide, y el hecho de que EA trate de parar la confección de las listas de NaBai, una «torpeza». Por su parte, la cabeza visible de los independientes, Uxue Barkos, apuntó que el texto que la Asamblea Nacional de EA decidió no rubricar «es muy claro» y que no van a echarse atrás.

Pese a lo distante de sus posturas, nadie se atreve a dar el paso definitivo. EA no se plantea renunciar a su reivindicación de formar parte de NaBai y asegura que sigue fiel a todos los documentos fundacionales y organizativos sobre los que se estructuró la coalición. Por su parte, el resto de miembros de NaBai aseguran que Eusko Alkartasuna tiene «la puerta abierta», que puede subirse al carro cuando quiera, siempre que firme el documento. Ahora bien, Aralar, PNV y los independientes advierten que sacarán adelante a NaBai con o sin EA.

Urizar señaló que su partido y, en especial, sus militantes han puesto «toda la carne en el asador durante ocho años» para que NaBai prosperase y sostuvo que «si hay voluntad, hay margen de maniobra». Aseguró que las reuniones con el resto de grupos son constantes, pero se mantuvo firme: no pueden contravenir el mandato expreso que les dio su Asamblea Nacional esta semana. Además, señaló que la situación actual «no es la deseada por el partido y tampoco la ha buscado».

Desde EA se preguntaban ayer qué es NaBai. Maiorga Ramírez se encontraba visiblemente dolido por el uso del membrete de NaBai en una carta «a la atención de Pello Urizar» que se remitió el miércoles a los medios. «Somos parte esencial de Nafarroa Bai y queremos estar ahí, porque seguimos comprometidos en exclusiva con NaBai», dijo Ramírez.

El dirigente navarro de EA apuntó que la coalición nació con el objetivo de ganar a UPN y que eso requiere de «la suma de fuerzas» y, en consecuencia, no entiende las «exigencias sobrevenidas» que se les han impuesto «en el último momento» y que, a su juicio, no tienen otro objetivo que «dinamitar» NaBai. «No existen ninguna razón para que pretendan negar la colaboración a EA». Aseguró que UPN y PSN «están deseando que seamos expulsados».

Si finalmente EA se queda fuera, Nafarroa Bai se quedará en poco más que el esqueleto. De los cuatro partidos que concurrieron juntos, aguantarían sólo dos, ya que Batzarre se marchó el año pasado. No obstante, Aralar y PNV cuentan con el apoyo de los independientes, un colectivo de un centenar de personas que intenta capitalizar como suyos aquellos votos que recibió la coalición en las pasadas elecciones que exceden a la suma de los votos de los partidos. Estos independientes tienen como representante en la Ejecutiva de NaBai a José Luis Mendoza, el director de Udalbide, y hablan por boca de Barkos. Tienen peso pero no aportan dinero para sufragar los gastos de la campaña.

La propiedad de una marca

Urizar cuestionó la legitimidad de Aralar, PNV e independientes para hablar en nombre de Nafarroa Bai y poner condicionantes. «Eso de que yo tengo la marca electoral y puedo hacer lo que me da la gana no es de recibo. La pregunta es cuál es el espíritu fundacional de NaBai. Ese espíritu define que debe de ser una plataforma lo más plural y lo más inclusiva posible para derrocar a la derecha. Para nosotros eso es lo importante y por eso seguimos peleando», señaló el dirigente nacional de EA.

Urizar criticó la utilización de los medios que han realizado sus hasta ahora socios: «Nos están atacando desde todos los lados». Además, acusó a PNV y Aralar de tener acuerdos conjuntos cuyo ámbito de aplicación supera las fronteras del herrialde y les emplazó a que los hagan públicos, así como Eusko Alkartasuna habla abiertamente de sus pactos con la izquierda abertzale, «que tienen como objetivo la normalización política y la paz».

Inquiridos sobre si se presentarán en solitario a las elecciones, los responsables de EA eludieron la respuesta. «Todavía no estamos a eso», zanjó Ramírez.