REVUELTAS POPULARES EN EL MUNDO ÁRABE
El Gobierno egipcio apela al diálogo pero aumenta la represión
Mientras los partidarios de Hosni Mubarak y los opositores seguían enfrentándose ayer en las calles de El Cairo, el vicepresidente egipcio, el general Omar Suleiman, hacía desde la televisión pública un llamamiento al diálogo con la oposición, pero rechazando la dimisión del presidente, un requisito considerado imprescindible por quienes reclaman su marcha. Hosni Mubarak repetía este mensaje al exterior en la ABC.
GARA | EL CAIRO
El vicepresidente egipcio, el general Omar Suleiman, aseguró ayer que el presidente Hosni Mubarak «cumplirá su palabra y abandonará el poder en setiembre» tras las elecciones presidenciales, a las que tampoco se presentará su hijo Gamal. Asimismo, instó a todos los grupos políticos de la oposición, incluidos los Hermanos Musulmanes, a que participen en el diálogo con el Gobierno «para llevar a cabo las reformas necesarias hasta entonces».
En una entrevista concedida a la televisión pública egipcia, el general Suleiman subrayó que Mubarak «ya ha cumplido las demandas legítimas» formuladas por los egipcios y, en particular, por los jóvenes en las protestas que comenzaron la semana pasada.
Sin embargo, Suleiman rechazó categóricamente la posibilidad de que Mubarak dimita, lo que la oposición reclama para iniciar un diálogo con el régimen. «La dimisión supondría el caos. No puede haber un Estado sin cabeza», destacó el ex responsable de los servicios secretos egipcios. El propio Mubarak insistió en esta idea en una entrevista concedida a la emisora estadounidense ABC.
El general Suleiman, nombrado vicepresidente por Mubarak durante esta crisis, es un personaje turbio que ha dirigido los servicios secretos. Además de reprimir al pueblo egipcio, mantuvo contacto directo con la CIA para que se establecieran en Egipto cárceles secretas en las que EEUU pudiera torturar impunemente a los detenidos en operaciones «antiterroristas» llevadas a cabo en cualquier país del mundo.
Poco después de la comparecencia de Suleiman, los Hermanos Musulmanes insistían en rechazar cualquier diálogo con el régimen mientras Mubarak permanezca en su cargo. Asimismo, la oposición mantenía la convocatoria de movilización en el Día de la Marcha para hoy.
Suleiman, sin embargo, señaló que podría reunirse hoy o mañana con el partido liberal Nuevo Wafd y la Asamblea Nacional para el Cambio de Mohammed El-Baradei. Asimismo, indició que ya había mantenido encuentros con «representantes de los jóvenes» y «personas sin afiliación política».
Junto a ello, destacó que «los candidatos a la Presidencia tienen que reunir algunos requisitos para que todo el mundo tenga seguridad en el nuevo mandatario», aunque no especificó qué requisitos.
A pesar de que los indicios apuntan a que el régimen sacó a la calles a sus partidarios el miércoles para agredir a los opositores en la plaza Tahrir de El Cairo, Suleiman calificó lo sucedido de «complot» y añadió que el Gobierno investigará «quién está detrás» para llevarlo a los tribunales.
«Muchos de los que se están manifestando en la plaza Tahrir lo están haciendo con agendas extranjeras», es decir, respondiendo a intereses de otros países, añadió Suleiman.
Mientras Suleiman intervenía en televisión, las movilizaciones seguían en las calles. Miles de opositores se congregaron en la plaza Tahrir de El Cairo a la espera de una nueva marcha masiva para hoy. Asimismo, al igual que el miércoles continuaron los enfrentamientos con partidarios de Mubarak, mientras el Ejército seguía sin intervenir.
Según un balance oficial, entre el miércoles y ayer murieron cinco personas y más de 830 resultaron heridas, por lo que el primer ministro, el general Ahmad Shafic, pidió «excusas».
A pesar de ello, los manifestantes pro-Mubarak continuaron ayer acosando a la prensa extranjera, a la que culpan de ofrecer una imagen distorsionada de Egipto y de apoyar a la oposición.
Así, tres periodistas de la televisión pública polaca TVP fueron detenidos por la Policía, un equipo del enviado de la CNN Anderson Cooper fue golpeado por partidarios de Hosni Mubarak ante la mirada de los agentes policiales, un periodista griego fue golpeado con palos de golf en la plaza Tahrir e informadores de los Países Bajos fueron acosados. La Policía Militar egipcia retuvo a seis enviados especiales de TV3, mientras que varios equipos de Al-Jazeera denunciaron haber sido golpeados y detenidos.
El fiscal general egipcio prohibió la salida del país de un alto cargo del gobernante NDP y de tres ministros del anterior Ejecutivo del país árabe, según confirmaron fuentes judiciales al diario opositor «Al-Masri Al-Yum».
Los servicios de seguridad de la Autoridad Palestina anunciaron oficialmente ayer que prohíben cualquier manifestación que tenga relación con las revueltas de Túnez y Egipto, tras cargar estos días contra varias concentraciones.
Un grupo de Facebook ha llamado a manifestarse hoy en Siria contra «la monocracia, la corrupción y la tiranía» del partido Baaz, que lleva gobernando 50 años. Facebook no se puede ver en Siria, pero los internautas burlan la censura.
Decenas de miles de opositores yemeníes se manifestaron ayer en calma en Sana'a para reclamar un cambio de régimen, al día siguiente de que el presidente Ali Abdallah Saleh anunciase que no se presentará a la reelección.
«Continuaremos nuestra lucha pacífica hasta la caída de este régimen injusto», proclamaron los oradores del Foro Común, alianza de la oposición parlamentaria, dirigiéndose a una multitud estimada por los organizadores en unas 100.000 personas.
Se trata de la mayor movilización que se ha realizado jamás contra el régimen del presidente Saleh, que lleva 32 años en el poder.
Simultáneamente, el partido en el poder, el Congreso Popular General (CPG), organizó una contramanifestación en la plaza Tahrir de Sana'a, donde la oposición tenía previsto manifestarse, obligándoles a cambiar el lugar de su movilización.
El CPG intenta retomar la iniciativa, tras el anuncio el miércoles de Saleh de no optar a un nuevo mandato en el año 2013 y de no transmitir el poder a su hijo, además de impulsar el diálogo con la oposición.
El presidente invitó a la oposición a anular las manifestaciones y a retomar el diálogo para formar un Gobierno de unidad nacional.
Pero la oposición, inspirada en la revuelta en Túnez y el movimiento popular en Egipto, mantiene sus convocatorias de movilización.
«Nuestra concentración de hoy [ayer] es un acto de lucha pacífica», declaró Najib Ghanem, diputado del partido islamista Al-Islah, miembro del Foro Común. Mientras participaba en una movilización que ocupó tres avenidas cerca de la Universidad de Sana'a, Ghanem añadió que «nos hemos reunido para hacer caer a un régimen corrupto y tiránico».
«La revuelta por la justicia comenzó en Túnez. Ahora continúa en Egipto y mañana Yemen se librará de la injusticia», añadió el parlamentario.
«Que Dios ayude al pueblo egipcio frente al tirano Hosni Mubarak», coreaban los manifestantes, rodeados por un servicio de orden, mientras la Policía se mantenía a distancia para prevenir cualquier incidente y un helicóptero sobrevolaba el sector.
«No a un régimen hereditario, no a una prolongación del mandato» del presidente Saleh, proclamaba una pancarta de los opositores, que se dispersaron en calma.
También hubo manifestaciones opositoras en Adén (sur), Taez e Ibb (centro). Jamal AL-JABIRI (AFP)
El presidente argelino, Abdelaziz Bouteflika, anunció ayer que el estado de excepción vigente en el país desde hace 19 años se levantará «en breve». Esta medida ha provocado numerosas denuncias de conculcación de derechos.