Las cajas que pidan ayudas tendrán que convertirse en bancos en tres meses
Las cajas que recurran a las ayudas del FROB para garantizar su solvencia tendrán que convertirse en bancos en un plazo de tres meses, según el decreto aprobado ayer por el Gobierno español, que prevé la entrada del Estado en su capital para sanearlas y luego venderlas.
GARA | MADRID
El Gobierno español avanzó ayer de nuevo en regular la privatización de las cajas de ahorros con el fin de dejar su negocio en manos de la banca privada. Así, las cajas que necesiten solicitar ayudas públicas al FROB tienen que traspasar todo su negocio financiero a un banco «antes de tres meses», según informó la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado.
Salgado explicó los detalles del Real Decreto Ley, aprobado ayer, que regulará el Plan de Reforzamiento del Sector Financiero español, con el argumento de facilitar la capitalización de las entidades.
El decreto establece también la reforma del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), al que autoriza a adquirir acciones o aportaciones al capital social de las cajas para reforzar sus recursos propios, en el caso de que no alcancen los mínimos requeridos.
Es decir, abre la puerta a una nacionalización parcial, pero que sólo servirá para sanear la entidad y ponerla luego en manos privadas.
Vender en cinco años
Salgado dejó claro que, en cualquier caso, la entrada del sector público en el capital de las entidades de crédito que lo necesiten será temporal, ya que el FROB tendrá que vender las acciones en un plazo máximo de cinco años.
Le ley da a las cajas la posibilidad de recomprar estos títulos a precios de mercado en un año o como máximo en dos, pero con la condición de reforzar sus planes de recapitalización.
El precio que pagará el FROB por estas acciones o aportaciones al capital social de las mencionadas entidades se fijará según «el valor económico de la entidad», que será determinado por «uno o varios expertos» que designará el propio fondo.
Además, la ayuda del FROB estará condicionada a la elaboración por parte de la entidad solicitante de un plan de recapitalización, que incluya un plan de reorganización de sus órganos directivos y asuma ciertos compromisos como la reducción de costes, la mejora del gobierno corporativo o el incremento de la financiación a pymes.
La ministra de Economía aseguró que el Gobierno cuenta con apoyos políticos suficientes para convalidar en el Congreso el decreto ley. La confederación de cajas de ahorro -CECA- lo consideró «muy positivo», aunque no recoge todas sus aspiraciones y exige a estas entidades un esfuerzo «sin paragón respecto a otras entidades financieras europeas».
Las pruebas de solvencia exigirán un capital principal del 8 % de los activos ponderados por riesgo, y el 10 % para aquellas entidades que no coticen, superen el 2 % de financiación mayorista y no hayan colocado al menos un 20 % de sus acciones entre terceros; es decir, la mayoría de las cajas.
Según Salgado, la necesidad de capital del conjunto de entidades es de 20.000 millones de euros. En cinco años deberán devolver las ayudas o convertirlas en acciones. Durante el primer año (dos de forma excepcional), podrán recomprar sus títulos.
La izquierda abertzale denunció que el decreto supone dejar las cajas en manos privadas y abandonar su función social. A su juicio, el PSOE actúa a las órdenes de la gran banca. Añadió que en Euskal Herria es posible blindar el modelo social de las cajas.
El Gobierno español ha cedido a las peticiones de las cajas de ahorro y ha prorrogado seis meses el plazo para su salida a bolsa, al establecer que las entidades financieras que necesiten recapitalizarse tendrán de plazo hasta el primer trimestre de 2012 para salir a bolsa. El Banco de España podrá prorrogar este plazo «con carácter excepcional». Según el texto aprobado ayer, las entidades cotizadas tendrán que contar con un capital principal del 8% de sus activos ponderados por riesgo, un porcentaje que se eleva hasta el 10% para aquellas que no coticen, superen el 20 % de financiación mayorista y no hayan colocado al menos un 20 % de sus acciones entre terceros. Como novedad, el texto incluye que si se detectan necesidades de adicionales de capital en los resultados de los test de solvencia que se llevarán a cabo en verano, estás deberán cubrirse. Salgado aclaró que el capital principal estará formado por el capital, las reservas, las primas de emisión, los ajustes positivos por valoración, los intereses minoritarios y, adicionalmente, los instrumentos obligatoriamente convertibles en acciones antes de 2014. Además, se considerarán también capital los recursos recibidos del FROB
Estos nuevos requerimientos entrarán en vigor el 10 de marzo de 2011, fecha en la que el Banco de España comunicará a las entidades su situación y las necesidades de capital. Aunque el plazo de salida a bolsa se retrase, para setiembre las entidades tienen que tener en marcha las fórmulas de conseguir recursos de terceros y la salida a bolsa. Si no lo hacen el Estado intervendrá, forzará su conversión en banco y entrará en su capital. GARA
