Euroliga
El arte de complicarse la vida
El Baskonia se jugará la clasificación y el primer puesto de su grupo la próxima semana en Vilnius tras darse ayer un pequeño respiro en un partido que sacó sin demasiados apuros a pesar de que volvió a tener otros dos minutos de peligrosa desconexión.
C. LABORAL BASKONIA 78
UNICAJA MÁLAGA 63
Jon ORMAZABAL
Aunque ayer pudo, por fin, tomarse un pequeño respiro dentro de su turbulenta trayectoria ante un rival menor, el Baskonia tendrá que jugarse en la última jornada en Vilnius un pase al cruce de octavos que, visto cómo ha transcurrido el grupo, debería estar ya en sus manos en caso de haberse mostrado más regular en su caminar. Incluso en un partido que debió ser plácido como el de ayer, los azulgranas tuvieron esos minutos de desconexión total que hicieron temer lo peor, pero afortunadamente el equipo tuvo la capacidad de resarcirse y, de la mano del paso adelante ofrecido por jugadores como Oleson, Barac y Teletovic, perfectamente dirigidos por Huertas, permitieron no tener que sufrir hasta el último aliento.
Al margen de esa tranquilidad final a a que no estábamos acostumbrados, el partido también tuvo sus claros, como el mayor equilibrio entre el juego interior / exterior, la mejoría defensiva y la bocanada de confianza que ganó un jugador como Stanko Barac que debe ser determinante en el futuro del club. Tras los dos minutos jugados en Atenas, el partidazo de ayer de Oleson, especialmente adquiriendo responsabilidades ofensivas, es otra gran noticia para espantar los malos augurios.
Desde el comienzo se evidenció que el Baskonia creía mucho más en la victoria, algo que en la primera parte tuvo su reflejo especialmente en su acierto en el tiro y el nefasto 7% -1/13- en triples de Unicaja. Lejos de estar redondo en su juego, el Baskonia sí que pareció tener algo más de ritmo en su juego, con un Teletovic mucho más comedido e implicado a medida que va mejorando de sus dolencias, y una mejor defensa grupal, parando bien las transiciones de Unicaja, su arma en ataque.
Al Baskonia también le costó atacar en estático, pero unos buenos y fluidos minutos al final del primer cuarto, con cuatro triples consecutivos por parte azulgrana, le permitieron tomar una bonita renta de en torno a diez puntos que lograron mantener hasta el descanso. El gigante Sinanovic, en el filial malagueño hasta hace pocos meses, fue junto a Freeland, el único sustento de un Unicaja bastante pobre.
Desconexión
Sin embargo, el actual Baskonia parece empeñado en sufrir y tiró toda la renta en apenas dos minutos, encajando un 0-9 de parcial, acumulando toda suerte de errores y pérdidas. Menos mal que entre que Unicaja tampoco estaba para mucho y la vuelta a cancha de Oleson esos minutos fueron minimizados.
Baskonia le devolvió ese mismo parcial y ahí se terminó el partido. Marcelinho Huertas creció hasta hacerse el amo del partido, Barac también se impuso en la zona y equipo y afición tomaron confianza de cara a las duras batallas que esperan a la vuelta de la esquina.
El Baskonia pasará como primero de grupo y se medirá al Maccabi con el factor cancha a favor si gana en Vilnius, mientras que será segundo y se medirá al Barcelona si cae en Lituania y Unicaja logra vencer a Panathinaikos en casa.
Dusko Ivanovic destacó que, para poder tener opciones en los títulos que le quedan por disputar de aquí a final de temporada, no es posible tener esas desconexiones que viene padeciendo el equipo durante todo el año. «Ha sido un partido en el que hemos tenido varias caras diferentes, algo que puede ser preocupante de cara al futuro. En lo que nos viene debemos tener la misma cara, la misma intensidad y la misma defensa en todos los instantes. Por suerte recuperamos la intensidad y la defensa y, a partir de ese instante, nos fue mucho más fácil jugar», señaló el montenegrino.
El técnico azulgrana parece tener además muy claro por qué se producen esos bajones en el juego. «La principal razón de las pérdidas y de esa mala racha fue que salimos relajados del descanso. Estos balones perdidos llegaron por pensar que lo íbamos a tener fácil y en esta vida no hay nada fácil», sentenció.
Preguntado por las distintas opciones que permitirían al equipo pasar de ronda, Dusko Ivanovic sólo contempla una. «Pensamos sólo en nuestro partido, ganando somos primeros y tenemos que tener esa capacidad de ganar ahí». J.O.