Hego Euskal Herria, entre las 40 zonas de la ue más ricas pero con más paro
Hego Euskal Herria se encuentra entre las 40 zonas más ricas de la Unión Europea, según los datos de Eurostat. Sin embargo, el paro, la precariedad, los salarios a la baja y las pensiones inferiores al umbral de la pobreza muestran la otra cara de la moneda: esa riqueza está mal repartida. En realidad, un 1,4% de la población vasca posee el 44,78% de la riqueza.
Juanjo BASTERRA I
La Oficina de Estadísticas de la Unión Europea, Eurostat, ha difundido estos días los datos sobre el PIB de las 286 regiones de los 27 países que la integran. Hego Euskal Herria se encuentra entre las cuarenta más ricas, es decir que han rebasado un PIB per cápita por encima del 125% de la media comunitaria. Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se sitúan en el 138% -34.500 euros por habitante- y Nafarroa, en el 131% -32.900 euros por habitante-. No obstante, Londres (343%), Luxemburgo (279%), Bruselas (216%), Groningen, de Países Bajos (198%) y Hamburgo (188%) están a la cabeza con cantidades que superan los 47.100 euros por habitante en Hamburgo y que alcanzan los 85.800 euros por habitante en el centro de Londres.
La UE de los 27 calcula que la riqueza media por habitante tasada en 25.100 euros. Diez regiones alemanas se encuentran entre las más ricas; cinco, en Países Bajos; cuatro, en Austria; cuatro en Gran Bretaña; tres en Italia; dos en Bélgica y Finlandia; una en la República Checa; otra en Dinamarca, en Irlanda, en el Estado francés, en Eslovaquia, en Suecia y en Luxemburgo. Cierran el bloque de las cuarenta más ricas Hego Euskal Herria y Madrid. Los datos regionales de Eurostat se refieren a 2008 y reflejan una desigualdad territorial exagerada. En Severozapaden (Bulgaria) el PIB por habitante es el 28% de la media europea, mientras que Londres casi triplica la media europea. El Estado español justo rebasa la barrera con el 103%, pero Galicia, Asturias, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia y Canarias no llegan a la media.
En términos generales se puede decir que existe suficiente riqueza en la Unión Europea, aunque está muy mal repartida y supone que la política económica que aplica la Unión Europea no está funcionando de una manera homogénea entre países, ni regiones de un mismo estado, porque la desigualdad es alarmante.
Si se analiza la realidad vasca en torno al PIB se demuestra también que esa riqueza está mal repartida; mientras unos pocos acumulan una riqueza importante, otros, los más, viven con lo justo y, entre éstos, muchos deben recurrir a la cada vez más rácana asistencia social para sobrevivir.
Hego Euskal Herria se encuentra entre las cuarenta zonas europeas con más riqueza, por lo que no se entiende que se sitúe entre los ocho países con tasas de desempleo más altas, con un 13,83%, igual que Irlanda, e inferior sólo a Eslovaquia, Estonia, Letonia, Lituania y el Estado español.
Más del 36,5% de los parados vascos no reciben prestación económica para sobrevivir. Tampoco se entiende que si es una zona rica como el gasto en protección social se encuentra ocho puntos por debajo de la media de la Unión Europea, como denuncia LAB. Ni que la precariedad laboral sea tan elevada, ya que el 93% de los contratos firmados son temporales y que la tasa temporalidad sea 8,6 puntos por encima de la media europea.
Los trabajadores vascos, por ejemplo, han perdido desde 1985 a 2009 en el reparto de la riqueza (PIB) 5,3 puntos, lo que significa un trasvase anual de rentas del trabajo a rentas empresariales y de capital de 4.000 millones de euros. Tampoco se entiende que nos encontremos con salarios inferiores en un 36,8% en relación a Bélgica; un 39,2% con Alemania o un 12,9%, con el Estado francés, según recogía ELA en su última resolución sobre negociación colectiva, teniendo en cuenta, además, que la productividad vasca está también en los lugares de cabeza de la Unión Europea. No se comprende que el 35% de los asalariados gane menos de 1.100 euros al mes, ni que el 71% de las pensiones sean inferiores al umbral de la pobreza, establecido por encima de los 1.032 euros.
En cambio, sí se sabe por los escasos datos que las haciendas públicas hacen públicos que 3.577 personas declararon en 2008 ingresos superiores a 160.293 euros, lo que significa un incremento del 114,52% en los últimos seis años. Y se sabe por el estudio del Banco Banif que en Hego Euskal Herria un 1,45% de la población controla el 44,78% de la riqueza, mientras que al 98,55% de la población le toca repartirse el 55,22% de la riqueza. Hay un fuerte desequilibrio.
Las compañías que cotizan en el Ibex 35 aumentaron en un 21,5% sus beneficios en 2010, según se han ido conociendo los datos económicos. Aunque todavía faltan por cerrar los datos cinco de esas sociedades, durante el año pasado consiguieron un beneficio global de 51.111 millones, un 21,5% más que en 2009.
Si tenemos en cuenta sólo las empresas del sector energético y de carburantes (Endesa, Iberdrola, Enagás, Gas Natural, Red Eléctrica, Repsol y Cepsa) en 2010 han cerrado con 14.195,8 millones de beneficio, un 41,78% más y muy próximos ya a los resultados de 2008, antes de la crisis, que obtuvieron 14.461,21 millones.
Queda claro que es la clase trabajadora la que está soportando la crisis. Porque esas sociedades repartieron 24.59223 millones en dividendos en 2010, y en enero, otros 2.731,21 millones. J. B.
