Ahora sí que las jugadoras de Itxako pueden presumir de poder defender y revalidar el título copero tras llegar a la final después de vencer al Mar Alicante por 26-18. En esa final (a partir de las 12.00, hora de Euskal Herria) les espera el Elda, que se deshizo en la otra semifinal al Ro´Casa por 26-29.

A pesar de que las de Lizarra se están acostumbrando a los títulos, éste que se disputa en el Pabellón Insular Antonio Moreno de Las Remudas de la localidad de Telde (Gran Canaria) puede ser muy especial para las navarras. Por un lado, el técnico Ambros Martín podría celebrarlo entre sus paisanos -sus familiares fueron desde Lanzarote para ver el partido-. Pero el mayor significado lo tendría para el directivo del club Juan Andrés Pastor, por el reciente fallecimiento de su padre.

Por lo tanto, muchas son las razones por las que las jugadoras navarras deberán defender el título logrado el año pasado.

Respecto al encuentro, la gran novedad fue la presencia de Nerea Pena entre las convocadas. La igualdad reinó en el inicio de partido, pero siempre con ventajas navarras. Oana Soit solventaba las jugadas estáticas siempre con lanzamientos certeros.

Las amarillas no lograban abrir brecha en el marcador. Como dato, cabe resaltar que hasta el minuto 20 las lizartarras no pasaron de los dos goles de diferencia. Fue hasta que Barbosa, gracias a un contraataque, puso el 9-5 en el marcador.

El acierto de Silvia Navarro, la intensidad de la defensa de Itxako y los bastantes errores en la definición del ataque alicantino permitían que las de Ambros Martín controlaran el partido sin hacer un balonmano excesivamente brillante. Al descanso se llegó con un 12-9 favorable.

Administrar el equipo

En la reanudación, las jugadoras navarras siguieron en sus trece: defensa, portería, velocidad y acierto. De esta manera, las alicantinas poco pudieron hacer ante la muralla amarilla y las diferencias fueron creciendo poco a poco, llegando a ser hasta de ocho goles.

El técnico aprovechó el panorama favorable para administrar las fuerzas de sus pupilas pensando en la gran final.

Los minutos finales transcurrieron con la única incidencia de que el marcador se estropeó y hubo que cambiarlo, aunque el público no sabía el tiempo de juego en que se desarrollaba el partido. Así las cosas, Itxako cerró el partido sin pasar ningún apuro como demuestra el definitivo 26-18. A pesar de la lejanía, la afición estará más cerca que nunca de las suyas.