Evitan fijar plazos para ello, pero dirigentes del PSE y del Gobierno de Lakua empiezan a asumir en sus discursos que la legalización de la izquierda abertzale resulta inevitable tras la presentación del nuevo partido Sortu. Quien con más claridad lo expresó ayer fue un político habituado a ir algo más adelante que otros líderes del partido: el alcalde de Donostia, Odón Elorza.

Durante la presentación de las candidaturas del PSE llevada a cabo en el Palacio Kursaal, Elorza afirmó que su partido espera «sin miedo en las urnas» a la izquierda abertzale porque «su concurrencia será inevitable, más pronto que tarde, para avanzar en la normalización».

El aspirante a la reelección en la Alcaldía de Donostia animó a sus compañeros a mirar hacia atrás, constatar «el sufrimiento» producido en el país, aceptar el «pluralismo» de la sociedad y ejercer como «la prueba cotidiana del algodón para los que dicen van a convertirse en nuevos demócratas». A juicio de Elorza, el PSE es «muy necesario para avanzar en el proceso de paz» y espera que sus ideas y proyectos «tengan éxito».

Asimismo, Odón Elorza opinó que para que los avances «no parezcan concesiones a los que hasta ayer nos agredían o miraban con odio», resulta conveniente desarrollar iniciativas «de concordia, que tengan en cuenta a las víctimas y la defensa de la memoria».

«La sociedad requiere acuerdos básicos entre fuerzas y moderación para que ETA dé pasos hacia su disolución, así como espacios de encuentro para la ciudadanía para recuperar el tiempo perdido», añadió en un dis- curso caracterizado por la asunción de que empieza otra era.

Expresiones similares sobre la legalización utilizó ayer la viceconsejera de Justicia del Gobierno de Lakua, María Victoria Cinto, en sendas entrevistas para ``El País» y «El Mundo''.

«Sabría lo que hacer»

En la primera de ellas, preguntada por si Sortu será legal, Cinto explica que «yo sabría lo que hacer, pero es una decisión que no me compete a mí y sobre la que tampoco considero que sea acertado mi pronunciamiento. Lo que sí tengo claro es que, más temprano o más tarde, la izquiera abertzale tendrá que estar en las elecciones».

«Los estatutos de Sortu han recogido un rechazo explícito de ETA que nunca antes se había dado -apunta la número dos del Departamento de Idoia Mendia-. La novedad es importante y habrá que sopesar su alcance, siempre desde un talante conciliador».

En las páginas de ``El Mundo'', Cinto -que es juez aunque actualmente ejerca de viceconsejera- plantea además que «no hay nada que inventar en los requisitos del juego democrático». Incide en que la Ley de Partidos y las resoluciones judiciales existentes «establecen con claridad meridiana qué requisitos se deben cumplir». En el acto celebrado en el Palacio Euskalduna organizado por Lokarri, el abogado Iñigo Iruin ya detalló que los principios y estatutos del nuevo partido se ajustaban plenamente a la Ley de Partidos y las sentencias de Estrasburgo.

A un nivel superior dentro del mismo Ejecutivo de Lakua, el consejero de Interior, Rodolfo Ares, reclamó que no se traslade «ninguna presión» a los jueces del Supremo, que deben decidir sobre la legalización de Sortu, y reclamó un «compromiso» de que se acatará la decisión de los tribunales «sea cual sea».

Además, deseó que los colectivos de víctimas de ETA que saldrán a la calle en Madrid el próximo 9 de abril pidan sólo «la desaparición de ETA» y no conviertan su manifestación en una protesta contra el Gobierno español. Sin embargo, precisamente el motivo de la marcha es exhortar al Ejecutivo Zapatero a impedir la legalización.

Urkullu pide concentrar el voto

Quien también baraja un nuevo escenario político y electoral es el presidente del PNV, Iñigo Urkullu. De hecho, ayer afirmó en un mitin que «no podemos permitirnos el lujo de una sopa de letras abertzale» y planteó «hacer todo lo posible para concentrar el voto abertzale en la 'pata' que representa el PNV».

Respecto a la situación generada con la presentación de Sortu, Urkullu aseguró que mantener la ilegalización «como instrumento político» para tergiversar las mayorías resulta «despreciable». El presidente del EBB siempre ha dicho estar seguro de que la izquierda abertzale estará en las urnas el 22 de mayo, pero matizó que el PSOE aún están analizando «si le salen las cuentas».