La ONG Transparencia Internacional (TI) ha denunciado esta semana que las mayores petroleras y gasistas del mundo apenas hacen públicas sus operaciones financieras desglosadas por países, una opacidad que permite las prácticas corruptas.

Ésta es una de las principales conclusiones de un nuevo informe de la ONG, difundido el miércoles por la agencia Efe, que apunta a que, sin embargo, la transparencia de estos gigantes energéticos, que controlan casi dos tercios de la producción global de gas y crudo, ha mejorado en términos generales entre 2008 y 2010, aunque de manera insuficiente.

«Es una buena noticia que la transparencia esté mejorando, pero demasiadas pocas empresas publican lo que pagan a los gobiernos de cada uno de los países donde operan», aseguró en un comunicado Huguette Labelle, presidenta de TI.

Sólo el 16% son transparentes

En concreto, sólo el 16% de todas las operaciones financieras que realizan estas compañías dentro de sus propios estados son transparentes, según los estándares de esta ONG, especializada en el estudio internacional de la corrupción.

No obstante, son patentes las diferencias en nivel de transparencia dependiendo de la empresa energética y del país de explotación. Así, mientras Statoil, la petrolera estatal noruega, hace públicas el 69% de sus operaciones financieras país por país, otras empresas como CNOOC y Petrochina (China), Petronas (Malasia), Inpex (Australia) y GEPetrol (Guinea Ecuatorial) no informan de ninguna.

A medio camino se encuentran la española Repsol, que detalla el 25% de sus operaciones y la estatal brasileña Petrobras, que hace públicas el 18%, según este informe. Por países, destaca que Petrobras hace públicas el cien por cien de sus operaciones en Brasil, cuando sólo reporta sobre el 23% de sus acciones financieras en Colombia y sobre el 17% de las que lleva a cabo en Ecuador. De manera similar, Repsol informa con transparencia sobre el 69% de las operaciones que realiza en Ecuador, frente al 15% de las que hace en Brasil y en Colombia.

Karin Lissakers, directora del Instituto de Control de los Ingresos (RWI), ONG que colabora en el informe, consideró «chocante» el escaso número de consorcios energéticos que dan cuenta de sus pagos a gobiernos, pese a las crecientes reivindicaciones de legisladores, inversores y ONG de estos «datos esenciales».

Además, el «Informe sobre Empresas de Petróleo y Gas 2011» de la organización Transparencia Internacional apunta que las empresas que cotizan en bolsa y las trasnacionales puntúan generalmente mejor que las nacionales en sus indicadores de transparencia.

El documento propone asimismo una serie de recomendaciones, como el control externo de los programas anti-corrupción de las petroleras y gasistas, la publicación de los datos de las subsidiarias de los grandes consorcios o la incorporación de la transparencia a los códigos de responsabilidad social.

También aconseja a los gobiernos de países con yacimientos de gas y crudo que endurezcan su legislación para obligar a las compañías energéticas a mejorar sus estándares de transparencia y sugiere que las petroleras estatales cumplan las normativas internacionales.

Por último, insta a las agencias de calificación de riesgo y a los analistas económicos a que incluyan la magnitud transparencia en sus estudios.

«Dos tercios de los pobres del mundo viven en países ricos en recursos naturales. Tienen el derecho a saber cuánto dinero obtienen sus gobiernos de las compañías que explotan esos recursos», argumentó Labelle.