Samuel Sánchez tomará la salida hoy en la París Niza con el objetivo de calibrar su estado de forma antes de su primer gran objetivo de la temporada, la Euskal Herriko Itzulia. El asturiano finalizó noveno en su primera vuelta de la temporada en Andalucía, donde logró un segundo puesto en una etapa, y su objetivo es mejorar su forma y pelear por la general en una prueba que no tiene un final en alto y sí presenta una crono de 27 kilómetros que debe marcar importantes diferencias.

Es la crono más larga que se disputa en la París Niza desde 1968 y en ella Markel Irizar quiere disputar la victoria y confirmar el gran momento que le llevó a lograr el triunfo final en Andalucía. La participación vasca se base en un Euskaltel en el que Romain Sicard será la segunda baza naranja y en Movistar, donde David López, junto a Tondo, será el encargado de liderar el equipo ya que Intxausti, que aparecía en la lista de preinscritos, no participará.

Juanma Garate será el principal apoyo de Luis León Sánchez, que parte con el dorsal número 1 como reconocimiento al triunfo que consiguió hace dos temporadas tras el desfallecimiento de Alberto Contador. El madrileño, ganador de la prueba en 2007 y 2010, es el gran ausente y el murciano queda junto a Vinokourov, vencedor en 2002 y 2003, como el único participante que sabe qué es subirse a lo más alto del podio en Niza.

La prueba abandona la prólogo con la que acostumbraba a arrancar y tanto la etapa de hoy como la de mañana están llamadas a resolverse al sprint porque no hay dificultades montañosas y los equipos de los sprinters puros deberán aprovecharlo.

El martes ya hay un puerto de Segunda a 22 kilómetros de meta que puede eliminar a unos cuantos sprinters y a partir del miércoles empieza la montaña con una etapa con siete puertos, tres de Segunda y cuatro de Tercera, aunque el último queda a 45 kilómetros de meta.

La Mure, el puerto más decisivo

Será a partir del jueves cuando se haga la selección entre los favoritos en el Col de la Mure, de Primera, cuya cima está a diez kilómetros de la meta en Vernoux-en-Vivarais. Además antes hay seis puertos, con otro de primera y uno de segunda.

El viernes llega la crono que debe marcar diferencias entre los primeros del día anterior y el fin de semana esperan dos etapas de montaña. En la del sábado los dos puertos de Primera quedan a mitad de recorrido en una jornada en la que la mayor dureza está en el kilometraje con sus 215 kilómetros. La de Niza será mucho más explosiva, sólo 124 kilómetros en los que se deben subir en la parte final dos puertos de Primera habituales en el final de la prueba, Le Turbie y Eze, antes de bajar a Niza.