LAB presentó ayer en Bilbo una propuesta para un nuevo sistema de Oferta Pública de Empleo (OPE) en Osakidetza que garantice los puestos vacantes y las necesidades de aumento de plantilla con el objetivo de mantener un sistema público gestionado «de forma transparente, eficaz y que responda a las necesidades y demandas de la población vasca». «Un sistema euskaldun, cercano y de calidad», detallaron.

El objetivo sería «poner fin al insuficiente número de plazas que se ofertan», porque, señala LAB, «llevamos tiempo alertando sobre el deterioro del sistema sanitario público para favorecer intereses de la sanidad privada». Esto supone que en Osakidetza «hay cada vez más cargas de trabajo, más cantidad de horas extraordinarias en concertación, más derivación de pacientes a clínicas privadas y que se siga sin resolver la cuestión de las listas de espera». El sistema de OPE actual es a juicio de LAB inadecuado y no responde a las necesidades de la sanidad pública ni de la población. De hecho, pone como ejemplo «el último proceso de OPE de 2008, que en 2011 aún no está resuelto».

Ante esta situación, la central mantiene unas líneas básica para «cubrir los puestos vacantes y el aumento de plantilla» de forma anual o bianual. Se tendría que basar en el proceso de concurso-oposición, «al que se sumarían el requisito de euskara y los méritos por el trabajo y la formación».

Tras las pruebas se confeccionaría una lista. A juicio de LAB, quien apruebe no tendría que volver a presentarse a ninguna OPE «a no ser que de forma voluntaria quisiera mejorar la nota».

LAB también demanda una ventanilla única «para reducir la burocracia» y la eliminación de las tasas.