Lesionado
Tres semanas de baja para Toquero
El parón liguero posibilitará que el gasteiztarra sólo se pierda los partidos ante Getafe y Villarreal. Óscar de Marcos se perfila como su sustituto en ataque.
Amaia U. LASAGABASTER
El Athletic pierde al «mejor complemento de Fernando Llorente» -Joaquín Caparrós dixit- para los dos próximos encuentros. Ni tan mal, porque el parón liguero del último fin de semana de marzo favorece en este caso a los rojiblancos.
Y es que son tres las semanas de baja que han previsto para Gaizka Toquero los servicios médicos del club. La resonancia a la que se sometió ayer ha confirmado que sufre una «lesión miotendinosa de grado I en el músculo bíceps femoral de la pierna derecha». Traducido, que Joaquín Caparrós no podrá contar con el gasteiztarra hasta la visita a Almería del próximo 3 de abril; o, a lo sumo, el encuentro que disputarán en San Mamés una semana más tarde Athletic y Real Madrid.
Lo cierto es que su ausencia crea un problema para el técnico rojiblanco. Si hay un hombre con el puesto asegurado en el once, junto a Iraizoz, Iraola y Llorente, ése es Gaizka Toquero. Y como alguno de los precedentes, ha ido resignando a sus competidores a buscarse las habichuelas en otros puestos o directamente en otros destinos. No en vano desde que debutara con el primer equipo, en enero de 2009 y recién llegado a la máxima categoría, se ha perdido menos de una quinta parte de los encuentros que ha disputado el Athletic. Casi siempre por causas de fuerza mayor.
Las pocas ocasiones en las que Joaquín Caparrós ha buscado alternativas forzosa -las más- o voluntariamente -las menos-, ha repartido oportunidades entre varios jugadores. Y ninguno parece haberle convencido. Markel Susaeta e Iker Muniain le gustan más en banda; Igor Martínez ha pasado del debut a Segunda B; y, con otras características, ni Ander Iturraspe, ni Urko Vera, ni Iñigo Díaz de Cerio parecen haberse ganado la confianza del técnico.
Sí lo ha hecho, de manera pública en poco más de una semana, su nuevo comodín Óscar de Marcos. Tras seis meses de trabajo en el lateral derecho y de competición, poquísima, en ataque, el de Biasteri superó con nota su examen más complicado, hace diez días ante el Valencia, al suplir con éxito la ausencia de Andoni Iraola. Una semana más tarde volvía a tener minutos, aunque saliendo del banquillo y acompañando a Llorente en punta. «Para un técnico, es una maravilla contar con un jugador así», aseguraba Caparrós tras el encuentro frente al Sevilla. La alabanza suena a preludio de su regreso a la titularidad, esta vez con responsabilidades ofensivas.
Iñigo Pérez, al Huesca
Por esa zona se movió también Iñigo Pérez el pasado miércoles, en uno de los poquitos partidos que ha disputado esta temporada. Con apenas 70 minutos de competición en sus piernas, el jugador navarro ha sido definitivamente cedido al Huesca hasta el 30 de junio.
Pérez, que suplirá la baja de larga duración de Dani Bauzá en el conjunto aragonés, debutó con el primer equipo del Athletic en octubre de 2009, en la visita copera al Rayo. La temporada se saldó con otras tres apariciones del centrocampista iruindarra en Liga y una más en Europa League. Este verano se ganó un hueco en la primera plantilla, pero su aportación no ha sido mucho mayor: apenas cuatro partidos, todos ellos como suplente.