El cineasta argentino Rodrigo Grande debutó en 2001 con «Presos del olvido», ópera prima protagonizada por los ilustres veteranos Federico Luppi y Ulises Dumont. Está claro que le ha cogido gusto a trabajar con intérpretes experimentados, porque en su segundo largometraje ha emparejado a Luppi con Norma Aleandro. Lo que cambia es de coguionista, ya que «Cuestión de principios» es fruto de su colaboración con el maestro del humor Roberto «El Negro» Fontanarrosa, con el que también ha escrito la serie televisiva «Los cuentos de Fontanarrosa» y otro guión cinematográfico todavía inédito que lleva por título «El enemigo público número uno». Dado que este escritor y dibujante de tiras cómicas en el diaro Clarín murió en el 2007, «Cuestión de principios» queda como un sentido homenaje a su figura.

La película es un cuento moral sobre la dignidad personal que no se compra con dinero, porque el protagonista posee el número de la revista que le falta a su jefe para acabar la colección. Se resiste a venderlo porque contiene un recuerdo gráfico de gran valor sentimental para él, y no cederá ante las presiones económicas, pese a que le cueste el enfando con su mujer.