Banca Cívica necesita 847 millones para reforzar su capital
Banca Cívica, el grupo bancario en el que se ha integrado Caja Navarra (CAN), precisa reforzar su capital con 847 millones de euros, según el análisis que ayer hizo público el Banco de España. La entidad calculó que en el conjunto del sistema financiero español son necesarios 15.152 millones para reforzar el capital de cuatro bancos y ocho grupos de cajas, una exigencia que forzará la salida a bolsa y la privatización de estas entidades.
GARA |
Banca Cívica, el grupo bancario en el que está integrada Caja Navarra (CAN) junto a Cajasol, CajaCanarias y Caja Burgos, tiene una necesidad de capital de 847 millones, según los cálculos del Banco de España. Han sido doce las entidades que incumplen los criterios establecidos por el Gobierno español y que precisan un total de 15.152 millones. En concreto, son ocho grupos de cajas de ahorros (Bankia, Catalunya Caixa, Unimm, Novacaixagalicia, Banco Mare Nostrum, Banco Base, Banca Cívica, Caja Duero-España) y cuatro bancos (Bankinter, Barclays Bank, Deutsche Bank y Bankpyme).
El Banco de España calcula que el 93% de las necesidades de capital identificadas (14.077 millones) corresponden a los grupos de cajas.
Las entidades que deben incrementar su capital principal tienen ahora quince días hábiles para presentar al Banco de España su estrategia y calendario de cumplimiento de los nuevos requisitos de capitalización.
El Banco de España dispondrá de otros quince días hábiles para aprobar o, en su caso, exigir la compra de una participación de la entidad con dinero público del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
Tanto BBK, Kutxa, Vital y Caja laboral, como el BBVA o el Banco Guipuzcoano, fusionado con Banco Sabadell, cumplen con los requisitos de capital establecidos por el Gobierno español.
En busca de inversores
Banca Cívica ya fue el año pasado una de las siete entidades que suspendió el test de solvencia llevado a cabo el pasado verano a 91 bancos y cajas europeos. El SIP al que pertenece Caja Navarra mantiene sus carencias a la espera de la salida a bolsa que prepara para los próximos meses o de la llegada de un inversor privado.
En un principio fue el fondo JC Flowers el que anunció su entrada, aunque más tarde enfrió las expectativas. En diciembre dijo que «había que ser muy valiente» para hacerlo. También el inversor indio Ram Bhavnani, que, perveía entrar en la entidad con una cantidad entre 110 y 120 millones, dijo que prefería esperar. Los responsables de Banca Cívica siguen buscando inversores. El pasado febrero, se reunieron con 15 de los inversores más importantes de Nueva York y acaban de encontrase con otros 17 en Londres. El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, consideró que los 15.152 millones de capital una cantidad «razonable y asumible». Al fin y al cabo queda por debajo de los 20.000 millones que preveía el Gobierno y aún más lejos de los 50.000 millones que estimaba Moody's, la agencia de calificación que recortó ayer un escalón la solvencia del Estado español.
El Banco de España ha medido en cada entidad la proporción entre los recursos de máxima calidad y los préstamos de riesgos. El plan para reforzar el sistema financiero exige que bancos y cajas inicien octubre con un capital principal del 8%, que se eleva al 10% para las cajas, por su dependencia de los mercados de financiación y por no cotizar en bolsa o no tener un 20% de su accionariado en manos privadas.
Caja Vital ha consideró «altamente satisfactorios» los datos del Banco de España en los que se asigna a la entidad alavesa un capital principal a cumplir del 8%, ya que ha podido justificar un «apalancamiento» en mercados mayoristas del 18,18%, inferior al 20% marcado como límite para el reforzamiento del sistema financiero. Según el Banco de España el nivel de capital principal de Caja Vital se sitúa en los 810 millones de euros, 316,4 millones por encima del mínimo exigido.
El sindicato LAB afirmó ayer que el decreto-ley para el «reforzamiento del sistema financiero» aprobado ayer mismo por el Congreso español de los Diputados «abre aún más la puerta a la privatización de las cajas de ahorro». Según afirmó Amaia Almirall, miembro de la ejecutiva nacional del sindicato, en una rueda de prensa ofrecida en Donostia, el decreto quita competencias a las comunidades autónomas y es discriminatoria con las cajas pues se les pide más condiciones que a los bancos. Todo ello, apuntó, «para ir privatizando y bancarizando las cajas de ahorro».
En este sentido, rechazó que «unos y otros», tanto en Madrid como en Euskal Herria, no dudan en ayudar incondicionalmente a la banca y seguir las órdenes de los denominados «mercados» con el objetivo de que se deje en sus manos «el tesoro de las cajas de ahorro y se abandone su modelo social». Por ello, Almirall hizo un llamamiento para defender un sistema financiero para Euskal Herria desde un modelo social, democrático, plural y participativo, donde los intereses de la ciudadanía se antepongan a «otros intereses partidistas, mercantilistas o de ámbito estatal».
Asimismo, se refirió a la nueva ley de cajas de la Comunidad Autónoma Vasca, que aseguró «algunos ya están pasteleando», y denunció que sus promotores sólo pretenden «garantizar sus intereses partidistas» y el control de las cajas para facilitar que se conviertan o creen bancos. Por último, criticó al PNV, es decir, a quien «controla las cajas vascas», por imponer un marco estatal de los convenios de estas cajas y rechazar el marco vasco de relaciones laborales. Amaia ZURUTUZA