Los amigos de facultad de Santiago Segura forman parte de la empresa productora, pero además, son parte de su mundo cotidiano. Los vemos en un reportaje cargado de trampas que se nos presenta como algo espontáneo, protagonizado por la periodista Samanta Villar, que en teoría se pasa veintiún días con alguien y lo editan y lo emiten. Y así ha sido en Cuatro con redifusión en FDF, que ocupaba los días previos a la entrega de los Goya, del estreno de Torrente 4 y hasta de un día de rodaje de la nueva película con Álex de La Iglesia.

Es decir, el planteamiento era bastante bueno ya que se trataba de encontrarse con el otro, la persona, más que el personaje, y en eso Segura es un fenómeno ya que es capaz de mostrarse con una simpleza absoluta, aparentemente desnudo, pero sin olvidarse nunca que en sí mismo es un personaje. Y como se hace en los días previos al estreno, el tono de la entrega tenía siempre por detrás o delante la necesidad de hablar de su nuevo proyecto, reforzada la impresión por la presencia además de sus amiguetes, Quico Rivera, `Paquirrín' y Toni Leblanch, lo que viene a convertirlo en una perfecta pieza de mercadotecnia de baja intensidad, pero quizás de la misma efectividad, aunque no hable casi nunca de la propia película.

Se veía de lejos la intención oculta, lo mismo que las partes muy guionizadas, muy de reportaje publicitario y aquellas que tenían una mayor espontaneidad y en los que se demuestra la santa paciencia de Segura para atender a todo tipo de paisano, joven, mayor, de mediana edad, con ganas de decirle algo y, sobre todo, de hacerse una foto con él. Uno de sus amigos asume el papel de fotógrafo. Impresionante la sala de una casa rural albaceteña a donde van a pasar los fines de semana y donde tienen una sala espectacular para ver cine. O su facilidad camaleónica al prepararse para la película de De la Iglesia. El programa es una fórmula que se salva por el personaje seguido y por la suerte de imágenes que se logren en esos días de seguimiento y en la pericia de la selección y montaje de las mismas. Santiago Segura y sus amiguetes son muy dados a proporcionar material más que suficiente, pero en este caso, nos pareció demasiado rebuscado.