El diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, advirtió ayer de que sería un «gravísimo error» que el Guggenheim de la capital vizcaina «anduviera por el mundo» sin la marca Guggenheim, y recordó los numerosos beneficios que ha reportado. Por ello, abogó por cuidar la marca y renovar el convenio con la Fundación neoyorquina. Las declaraciones llegaron un días después de que Joseba Arregi, ex consejero de Cultura, dijera que la pinacoteca bilbaina «es un proyecto con capacidad para andar solo», aunque añadió que no sería necesario «renunciar a alianzas internacionales».

El diputado reprochó la conducta de Arregi, a quien consideró «uno de los promotores» de esta idea. «Decir que este museo ha cogido velocidad de crucero y ya puede andar por el mundo sin la marca, creo que es un gravísimo error. Si algo tenemos es, precisamente, la marca que nos ha puesto en el mundo», añadió.

En cuanto al convenio que ambas partes firmaron en 1998 y que expira el próximo 2014, Bilbao aseguró tajante: «Desde luego, al cien por cien, y sin ningún tipo de matiz, yo y los que conmigo están, somos partidarios de renovar el convenio con la marca Guggenheim».

Joseba Arregi aseguró que las condiciones del contrato contienen «desequilibrios» a favor de los intereses de la fundación neoyorquina, una opinión que Bilbao no comparte. Para él, «las actuales condiciones (del convenio) han sido ventajosas»: «Si algo hemos tenido son beneficios. Que haya que adaptarlo al día de hoy, habrá que hacer las adaptaciones que sean precisas, pero, si algo nos ha reportado ese convenio, son beneficios. Y cuando una cosa ha funcionado bien, nos ha ido bien y nos ha reportado muchos beneficios, tenemos que cuidarla y procurar seguir con ella», subrayó.

En este sentido, recordó «cuántas ciudades y cuántos territorios quisieran tener en su casa la marca Guggenheim. Aquí la tenemos, pues cuidémosla, démosle cariño, que nos ha reportado muchos beneficios», insistió.

La labor de Vidarte

También quiso reconocer la labor del actual director del museo, Juan Antonio Vidarte, a quien otorgó parte del éxito de la pinacoteca. «Cuestionar la figura de Juan Ignacio Vidarte puede responder a otros intentos de maniobras que no van contra él», y añadió: «Otra cosa es que (...) personas del Departamento de Cultura hablen de imperialismo americano».