Caja Laboral Baskonia y Estudiantes disputaron el «duelo de los eliminados» -los gasteiztarras de la Euroliga, los madrileños de la Eurocup- en busca de una victoria balsámica. Y en verdad hay que reconocer que fueron los baskonistas quienes hallaron alivio. A pesar de la ausencia de Stanko Barac, que se quedó en el banquillo por un golpe en la rodilla, y de sufrir en consecuencia para cerrar el rebote defensivo -los del Ramiro capturaron hasta 19 rechaces bajo el aro del Baskonia-, los hombres de Dusko Ivanovic lograron restañar sus heridas con un triunfo más que holgado.

De hecho, el cuadro gasteiztarra se paseó ante un Estudiantes donde sólo ofreció resistencia el sempiterno Nik Caner-Medley. Apenas se vio rastro alguno de la habitual garra estudiantil, algo que aprovecharon los locales para marcharse el primer cuarto y no ver la estela de su rival en ningún momento.

Ante todo, la escuadra baskonista hizo gala de un acierto tremendo. En total, los pupilos de Dusko Ivanovic atinaron en 34 lanzamientos -13 de ellos triples- de 55 intentos, un 62% de efectividad que desarboló al Estudiantes. San Emeterio volvió a ser el principal anotador azulgrana -21 puntos-, aunque en total seis de los ocho jugadores que empleó Ivanovic llegaron o superaron los 10 puntos, destacando un David Logan -17 puntos- que ofreció un torrente de clase en la segunda mitad.

Tras el 25-16 del primer cuarto, el nivel bajó en el segundo, debido a una zona 3-2 de los de Luis Casimiro. A poco que los tiradores baskonistas calibraron sus muñecas, esa trampa tampoco hizo mella. De hecho, el duelo quedó finiquitado al descanso, con el marcador reflejando un 40-24 bien claro.

Pero, por si quedaban dudas, los baskonistas remataron el partido en el tercer parcial, para relajarse en el último período.