Las bolsas europeas no sufrieron en exceso al conocerse la petición del rescate por parte de Portugal y la subida de los tipos de interés en la eurozona al 1,25%. Según los expertos, ambas noticias estaban descontadas puesto que los datos apuntaban a la debilidad de Portugal y al final del dinero barato. Es más, ahora los focos comienzan a fijarse en el Estado español, aunque se mantiene la tesis de que nada tiene que ver con Portugal y que todas las medidas de recortes sociales tomadas hasta la fecha van en el buen camino. De otra parte, el BCE cumplía con el guión al subir los tipos en un 0,25% para luchar contra la inflación. No obstante, Jean Claude Trichet recordó el papel del Banco Central como vigilante de la estabilidad de precios, lo que pudiera significar, según muchos analistas, que el cambio de tendencia en la política monetaria sólo ha dado un primer paso. Así las cosas, el Ibex, que llegó a superar los 10.900 puntos, se conformó con una leve subida del 0,04%. Hoy saldrá desde los 10.849,10 puntos. En un tono más bajo cerraron París (-0,49%), Fráncfort (-0,50%) y Londres (-0,56%). En el Ibex, de nuevo se vio el músculo bancario. Bankinter sumó un 4,30%, Santander un 1,71%, Popular un 1,50%, y BBVA un 0,27%. Las acciones de Sacyr y Amadeus, que ganaron más de un 2%, se incrustaron entre las mejores del día. En el otro lado de la balanza se colocó Gamesa (-4,45%). Repsol, que bajó un 1,61%, fue el peor de los grandes. En París, las mayores alzas fueron para Crédit Agricole (+1,81%) y BNP Paribas (+1,78%), mientras que Schneider (-3,01%) fue el más penalizado.