El Real Madrid visita San Mamés
Un problema matemático
Los rojiblancos, que quieren afianzar su posición, no se fían de la relajación de su rival, pese a la distancia que le separa del líder.
Amaia U. LASAGABASTER
Fútbol y lógica no siempre van de la mano, pero la calculadora es un artilugio habitual en esto del balompié, sobre todo cuando las temporadas entran en su tramo final. Tanto que, por ejemplo, se ha convertido en uno de los argumentos fundamentales en la previa del encuentro que enfrentará esta noche a Athletic y Real Madrid. Si alguien esperaba que los merengues se relajasen después de que su último tropiezo dejase la Liga prácticamente sentenciada, desde uno y otro bando se han afanado en negarlo: mientras haya opciones matemáticas de atrapar al líder, el equipo de Jose Mourinho seguirá peleando.
No es el único problema matemático que se le plantea al cuadro bilbaino en su regreso a San Mamés. De nuevo, frente a las sensaciones, los números confirman que la Catedral deberá ejercer toda su magia para frenar a un rival prácticamente imbatible. Es decir, que la superioridad estratosférica del Barcelona -en imagen y en cifras- no puede ocultar el potencial igualmente abrumador de su archienemigo. El segundo mejor Real Madrid de la historia ha sumado 23 victorias en 30 jornadas -seis de sus siete tropiezos, eso sí, han caído lejos del Bernabéu-, anota más de dos goles por partido y encaja uno cada 120 minutos.
Cuando las matemáticas se aplican a la economía, el panorama también es descorazonador, teniendo en cuenta que a Florentino Pérez no le tiembla la mano para reforzar su equipo cada año con lo mejor de lo mejor. Aunque afortunadamente, las cuentas no siempre cuadran.
De la misma manera que en la tradicional riña entre letras y ciencias, a veces son las primeras las que salen vencedoras. Y no hay más que echar un vistazo atrás. Porque los números siempre, o casi, apuntan en la misma dirección cuando el Real Madrid visita San Mamés. Pero no los resultados. Si hay un equipo y un escenario que sabe tirar de factores como corazón o casta para saltarse las desigualdades, esos son el Athletic y la Catedral. Un binomio que siempre origina un escalofrío en la espina dorsal de cualquier equipo, incluído el madridista.
Y por si fuera poco, la calculadora también cuenta esta vez para el propio conjunto rojiblanco, sumergido en una apretadísima pelea por los billetes de la Europa League. Y si ya marca que los puntos de casa no bastarán para asegurarse uno, qué decir si además se dejan escapar algunos.
Pese a lo cual, Joaquín Caparrós no quiere tildar el choque de «definitivo», cuando todavía «quedarán otros 21 puntos en juego». «Es un partido importante para seguir aspirando a lo que queremos», asume, de todos modos el técnico rojiblanco, que también se abona al argumento estrella de la semana. Es decir, que el Real Madrid no ha arrojado la toalla. «Hasta que no esté perdido matemáticamente, no lo va a dar por perdido. Va a venir a por la victoria, pensando que el próximo partido lo juega contra el Barcelona», aseguró.
Por si quedan dudas, en el rival se incide en la misma teoría. «En este club, mientras matemáticamente haya posibilidades, nunca se deja de competir», insiste Aitor Karanka, al que ayer cedió los micrófonos Jose Mourinho. «Puede parecer que se dice por decir, pero nunca un entrenador o jugador que se haya puesto esta camiseta ha dejado de competir mientras ha habido opciones».
Joaquín Caparrós se ha visto obligado a convocar a 19 jugadores, ante los problemas físicos que ha arrastrado Iker Muniain a lo largo de toda la semana. Más definitivos son los de Fernando Amorebieta, que se ha quedado fuera de la citación.
Las dos novedades en la convocatoria pasan por la presencia de Aitor Ocio y Markel Susaeta, aunque en principio ambos seguirán el inicio del choque desde el banquillo. Los que sí podrían formar parte del once son Igor Gabilondo y David López. Más evidente en el caso del de Añorga, con plaza casi segura en banda izquierda. Más complicado en el caso del riojano, que podría entrar en banda derecha, desplazando a Gurpegi o a Orbaiz al banquillo. La actuación de ambos en Almería complica sus opciones.
En lo que respecta al Real Madrid, es previsible que Jose Mourinho no alinee a su once de gala. El portugués ha incluído a los renqueantes Marcelo y Cristiano Ronaldo en la convocatoria -aunque deberá descartar a dos jugadores antes del choque-, pero es probable que se queden, cuando menos, en el banquillo. Los que ni siquiera han viajado han sido Khedira, presa de la gripe, y Benzema, por precaución. A.U.L.
Gamiz Fika acoge hoy el 12º Hermanamiento de Peñas del Athletic. La jornada arrancará a las 10.00 con la apertura de txosnas y el lanzamiento del chupinazo y culminará a mediodía, con la comida de los peñistas en el frontón de Gamiz.
En caso de saltar al campo, Carlos Gurpegi disputará su 250º encuentro oficial con el Athletic. El navarro, de 31 años, llegó a Lezama en categoría juvenil y debutó con la camiseta del Athletic el 31 de marzo de 2002, a las órdenes de Jupp Heynckes en un choque liguero en El Madrigal. Gurpegi alcanza esa cifra pese a los dos años de sanción que debió cumplir, que le tuvieron fuera de los estadios entre 2006 y 2008.
El Athletic impondrá hoy a Iñaki Azkuna la insignia de oro y brillantes del club «por su apoyo y contribución a hacer del Athletic, de sus valores y de sus infraestructuras, una entidad del siglo XXI». El acto se realizará en el Museo del Club antes del encuentro.