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CRíTICA cine

«Invasión a la Tierra»

Mikel INSAUSTI

Las guerras actuales en que participa el ejército de los Estados Unidos no interesan a su público cuando son llevadas al cine y prueba de ello es que las películas basadas en la invasión de Irak no han sido comerciales. Los estudios de mercado en Hollywood indican que hace falta encontrar para la ficción una fuerza militar enemiga más poderosa, pero una potencia de tal calibre sólo puede provenir ya del espacio exterior. En “Invasión a la tierra”, originalmente titulada “Battle: Los Angeles”, los marines yanquis luchan contra el destructivo avance de las naves extraterrestres sobre puntos estratégicos de la costa californiana. En consecuencia, la película resultante pertenece de lleno al género bélico en toda su formulación, y no tanto al de ciencia-ficción. Los helicópteros vistos en la cinta bélica de Ridley Scott “Black Hawk derribado” adquieren el protagonismo de la acción, a la vez que el punto de vista con el que se ha de identificar el espectador es el de los soldados, de lo que se deriva un discurso patriótico omnipresente.

El héroe de la función es un modesto sargento encarnado por Aaron Eckhart, alrededor del cual el realizador de origen sudafricano Jonathan Liebesman mueve la cámara de forma muy nerviosa, con escenas de combate visualmente electrizantes que explotan y perfeccionan la envolvente técnica de filmación inaugurada por Steven Spielberg en “Salvar al soldado Ryan”. Todos corren entre explosiones, mientras Santa Mónica y otros escenarios se vuelven irreconocibles al ser destruidos por los bombardeos.

En medio de la confusión se impone el sacrificio humano, porque estos marines son conscientes de estar al servicio del guardián de Occidente y de ser los salvadores del mundo. Podrían ser perfectamente autómatas, ya que los diálogos que el guionista Christopher Bertolini ha puesto en sus bocas carecen de signo alguno de vida inteligente. Les basta con la ayuda de una veterinaria para estudiar la anatomía de los invasores y descubrir sus puntos débiles.

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