Los miembros de la Ejecutiva de LAB Oihan Ostolaza y Garbiñe Aranburu rechazaron ayer que se deba extender la moderación salarial en los «próximos lustros», como planteó el ministro español de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez. La central afirmó que en la negociación colectiva de este año exigirá subidas salariales «por encima del IPC». Reclamaron el Marco Vasco de Relaciones Laborales y de Protección Social para «abordar el debate de la competitividad, sin que sea a costa de reducir los costes laborales y sociales de la población».

En este proceso de reformas que ha entrado el Gobierno español, Valeriano Gómez anunció hace unos días la necesidad de mantener la moderación salarial, al menos, durante quince años. LAB considera que esa postura del máximo representante del ministerio español de Trabajo tiene que situarse «dentro de un contexto generalizado de ataque a los salarios. Para aumentar la competitividad, quieren que los trabajadores paguemos una vez más la crisis».

El presidente del BBVA, Francisco González, se unió al ministro y pidió que «se eliminen los problemas de la negociación colectiva» y, por otro lado, «relacione los salarios con la productividad».

El tema salarial «no se encuentra en debate en la reforma de la negociación colectiva», pero LAB augura que «tendrá consecuencias en los convenios».

En el Acuerdo Interconfederal de Negociación Colectiva de 2010, que firmaron CCOO y UGT con la patronal, figuraba de hecho la moderación salarial, como recordaron Ostolaza y Aranburu, «para mantener y mejorar el empleo», pero, como puntualizaron, «no ha sido así. Hay más paro y, además, los salarios han bajado».