«Es claro que se trata de, por lo menos, un asesinato», aseguraba ayer el abogado de la acusación particular, Sergio Gómez. Parece que el juez también maneja indicios claros en ese sentido y ayer, tras tomarle declaración durante dos horas, envió a la cárcel al presunto responsable de la muerte de la joven Yanela Zaruma. Eso sí, las diligencias judiciales continúan bajo secreto de sumario, según informó el Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

El exnovio de la joven, E. R. G. LL., con quien tenía una hija de tres años, fue detenido en la noche del lunes al martes y ayer prestó declaración ante el juez, después de que el pasado jueves el propio magistrado acordara prorrogar su detención, al considerar que existían «indicios racionales de criminalidad» en la conducta del detenido.

Según ese auto, el juez explicaba su decisión porque consideraba «imprescindible» la realización de otras diligencias antes de tomar declaración al imputado «para una mejor instrucción de la causa y aclaración de los hechos».

Se referiría principalmente a los análisis de ADN que habrían constatado que la víctima tenía restos biológicos de su ex pareja en las uñas. Este hecho, unido a las heridas superficiales que presentaba el joven, indicarían que entre ambos se habría producido un forcejeo.

La familia de la víctima, según comunció su letrado, se ha tomado la decisión judicial «con cierta tranquilidad y con amargura, porque dentro del dolor nunca termina de creerse que haya podido suceder una cosa tan ruin y brutal como es un asesinato».

Probablemente, este mismo lunes se dictará un auto de inhibición hacia el Juzgado de la Violencia sobre la Mujer número 1 de Iruñea, al tratarse de un caso de violencia de género, y a partir de ahí la jueza deberá ratificar el auto de prisión y se seguirá con la instrucción, con la toma de declaración judicial de los testigos y el estudio de los informes. De ratificarse, el juicio podría celebrarse dentro de un año, en principio con jurado popular.

El cuerpo ya está en Burlata

El sábado, en la concentración qur tuvo lugar en la Plaza del Castillo de Iruñea, y a la que acudieron más de un centenar de personas, una amiga de la familia que habló como portavoz, Rosa Soto, afirmó que los padres de Yanela Zaruma se encuentran «muy mal». Aclaró que «la situación es muy complicada, muy dolorosa. Hay que pensar que son dos familias que están pasándolo muy mal. Todos están muy afectados y esperando con paciencia a lo que diga el juez».

Por otro lado, recordó que se está recaudando dinero para poder repatriar el cadáver de la joven a Ecuador, su país de origen. Fuentes próximas a la familia informaron ayer que el cadáver de la joven fue trasladado finalmente al tanatorio de Burlata, localidad en la que Yanela residía con sus padres, y donde está siendo velado por familiares y amigos.

Posteriormente, el cuerpo será repatriado a su lugar de origen, a la provincia amazónica de Zamora Chinchipe, en Ecuador. A este respecto, el abogado de la familia indicó que estos trámites están en marcha, por lo que se espera que dentro de una semana o semana y media esté ya repatriado.

«Esta violencia es un atentado»

Rosa Soto, amiga de la familia y portavoz, denunció también el sábado que «la violencia de género supone un atentado contra los derechos humanos que impide a la sociedad continuar avanzando por la senda del bienestar y el progreso social».

Soto añadió que «las campañas deben continuar para que las mujeres no lo oculten y busquen salidas, y para que los hombres que ejerzan la violencia en sus relaciones entiendan que no se les va a permitir y que van a ser penalizados». Finalmente, recordó que «el pasado año se registraron en Navarra 1.210 denuncias relacionadas con la violencia de género».