Los islandeses reiteran su negativa a pagar las deudas de sus bancos
Por segunda vez, los islandeses se mostraron en un referéndum contrarios a un acuerdo para reembolsar a los gobiernos de Gran Bretaña y Países Bajos el dinero empleado para indemnizar a las víctimas de la quiebra de la entidad islandesa Icesave. Mientras Londres y La Haya anuncian vías judiciales, Reykjavik busca que su adhesión a la UE no se vea obstaculizada.
GARA
Los islandeses volvieron a rechazar en referéndum el sábado el acuerdo de indemnización de 3.900 millones de euros reclamados por Londres y La Haya, que recurrirán a la justicia para recuperar las compensaciones pagadas a clientes del banco islandés Icesave tras su quiebra en el año 2008.
Cerca del 60% de los electores dijo «no» al acuerdo de indemnización de Gran Bretaña y Países Bajos, dos países de los cuales unos 340.000 clientes fueron víctimas de la quiebra.
El acuerdo sometido a votación fue negociado por Reykjavik con ambos países. A través del mismo se les reembolsaría el dinero empleado para indemnizar a las víctimas de la bancarrota de Icesave.
Los gobiernos de Londres y La Haya manifestaron su decepción y dijeron que, puesto que ya no es posible un acuerdo negociado, habrá que reactivar la acción judicial emprendida ante la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC).
El Gobierno islandés intentó ayer calmar los ánimos. El ministro de Finanzas, Steingrimur Sigfusson, quien había negociado el acuerdo, aseguró que Islandia no tiene «ningún problema» en saldar sus deudas.
«Las reservas [de Islandia] son más que suficientes para cubrir todos los pagos en los próximos años», añadió el ministro ante los medios de comunicación.
El «no» al acuerdo de pago tiene también consecuencias políticas, en un país en el que la oposición conservadora pidió nuevas elecciones.
Por segunda vez en poco más de un año, los esfuerzos del Ejecutivo de Reykjavik -de centro izquierda- para resolver este contencioso se vieron desautorizados por el electorado, que se niega a pagar los costes de la quiebra de la citada entidad.
Marzo de 2010
En marzo de 2010, el «no» al acuerdo ganó el referéndum con un 93% de los votos.
Desde la publicación de los primeros resultados, la primera ministra, Johanna Sigurdardottir, expresó su «decepción» por el rechazo al acuerdo, que considera «capital» en el proceso de adhesión de este país nórdico a la Unión Europea. En un esfuerzo por mostrarse conciliadora, ayer declaró que su Gobierno «quiere una solución rápida».
«Intentaremos cooperar con la autoridad de vigilancia de la AELC, en cuanto a un proceso judicial», añadió.
Cuando Icesave quebró, Londres y La Haya devolvieron la totalidad de los ahorros que sus ciudadanos tenían en ese banco, unos 3.900 millones de euros, que ahora reclaman al Estado islandés, lo cual equivale a un tercio de su PIB.