«La soberanía alimentaria es la alternativa real al capitalismo»
El Día Mundial de la Lucha Campesina se conmemoró también en Hego Euskal Herria. EHNE-Bizkaia reivindicó «el derecho ciudadano a determinar las políticas agrarias adecuadas» y recordó que «la soberanía alimentaria es la alternativa real al capitalismo». En Iruñea, EHNE-Nafarroa encabezó esta jornada con el apoyo de organismos sociales y ecologistas para denunciar que las políticas alimentarias de los últimos 20 años «han perjudicado a la agricultura».
Juanjo BASTERRA |
Este domingo se conmemoró el Día Internacional de la Lucha Campesina en recuerdo de los 29 campesinos inocentes muertos el 17 de abril de 1996 en Eldorado dos Carajás (Estado de Pará, Brasil) mientras luchaban por el derecho al acceso a labrar la tierra y defendían la producción alimentaria de los campesinos y pequeños agricultores.
Vía Campesina, organización en la que está integrado el sindicato agrario vasco EHNE, recordó ante esta fecha «la necesidad de liberarnos del sistema de producción de alimentos industrial» y se reafirmó en la creencia de que «la agricultura campesina puede alimentar a todo el mundo».
A su juicio, «la crisis alimentaria actual muestra que el sistema alimentario industrial predominante ha fracasado» y añadió que «las promesas de la Cumbre de la Alimentación de 1996, reflejadas en el Objetivo de Desarrollo del Milenio, de reducir el hambre para 2015 no se cumplirán». Vía Campesina insistió en que está ocurriendo lo contrario, «el número de hambrientos se ha incrementado de 800 millones en 1996 a 1.000 millones en este momento».
Políticas agrarias adecuadas
En este sentido, EHNE-Bizkaia reivindicó ante esta fecha internacional «el derecho ciudadano a determinar las políticas agrarias adecuadas» y mostró su apoyo a las más de cien acciones que Vía Campesina está llevando a lo largo del mundo ante el Día Internacional de la Lucha Campesina. Son iniciativas en defensa de los derechos de los campesinos y la lucha contra el acaparamiento de tierras que se producen en América Latina y Africa, sobre todo.
También hubo acciones en contra de la imposición de los transgénicos, como en el Estado español, lo mismo que el acceso a la tierra, la soberanía de las semillas y la soberanía alimentaria. En Bruselas hubo una acción bajo el título «Liberemos nuestras semillas»; en Brasil, Vía Campesina organizó un seminario sobre «los 15 años de impunidad, tras los sucesos de Eldorado dos Carajás» y hubo una marcha campesina por el derecho a la tierra. En Corea, las mujeres campesinas reclamaron la reforma de la legislación sobre cajas cooperativas agrícolas y en contra del trato de libre comercio entre Estados Unidos, Corea y Unión Europea.
En Bilbo esta semana pasada se desarrollaron unas jornadas organizadas por Hegoa, Instituto Universitario de Estudios sobre Desarrollo y Cooperación Internacional, y distintos movimientos sociales. Se subrayó sin ningún género de dudas que «la alternativa al capitalismo, inmerso en un proceso de falsas soluciones ante la crisis que el mismo genera mercantilizándolo todo, pasa por la soberanía alimentaria, como derecho ciudadano y político a determinar las políticas agrarias adecuadas». En esas jornadas se dejó claro que el «enemigo es muy fuerte», pero se reivindicó un cambio en este modelo de políticas en defensa de la industria alimentaria, «que ha fracasado». Se animó a los baserritaras y ganaderos vascos a participar e impulsar proyectos sociales alternativos, y se recordó a la sociedad la iniciativa de «la red de personas productoras y consumidoras `nekasarea', impulsada por EHNE-Bizkaia».
La Plataforma por la Soberanía Alimentaria de los Pueblos, que apoyan EHNE-Nafarroa, Mugarik Gabe, Ingeniería Sin Fronteras, Ocsi, grupos de consumo Jateko y Karrakela, Medicus Mundi, Ekologistak Martxan, Sodepaz, Greenpeace, Plataforma Navarra Libre de Trangénicos, Banco del Tiempo, Dale la Vuelta, Setem, Reas y la Red de Semillas, organizó un programa desde las huertas de Aranzadi hasta la plaza San Francisco de la capital navarra. En tres espacios, estas organizaciones recibieron a los más jóvenes a través de cuentos y juegos relacionados con la agricultura. Hubo otro área sobre los impactos del modelo agroalimentario, con mesas de debate sobre la feminización de la agricultura, los transgénicos y las alternativas desde la soberanía alimentaria.
En el tercer área denominada «alternativas de consumo» se expusieron una serie de muestras en vivo y en directo en la elaboración del queso artesano, herramientas del oficio de apicultor y hubo una degustación de carne ecológica.
Según EHNE-Nafarroa, los tres alimentos son un ejemplo de los productos que integran las cestas del proyecto Arco de consumo responsable y comercialización directa que está llevando adelante en Lizarra.
Esta manera de mostrar en directo lo que los agricultores reivindican tuvo una acogida importante entre el público navarro. J. B.