La población, incluso los candidatos a presidente constataban ayer que la falta de entusiasmo fue la nota predominante de los comicios presidenciales del Chad. Cinco millones de votantes estaban llamados a las urnas, de los que poco más de el 20% ejercieron su derecho a voto. Candidatos y analistas justificaban la falta de interés en la llamada al boicot realizada por tres de los principales candidatos del actual jefe de estado Idriss Deby, al considerar que aún seguían en circulación miles de tarjetas de electores no atribuidas desde las elecciones legislativas de febrero. Es por eso por lo que, incluso antes de que comenzaran a votar, ya daban por ganador a Deby, instalado en el poder tras de un golpe de Estado militar.