El prefecto de Pirineos Atlánticos no ha otorgado el permiso necesario para instalar una central fotovoltaica en el pueblo bajonavarro de Gabadi, a pesar de que el informe del responsable técnico había dado el visto bueno al proyecto.

El colectivo que se oponía al mismo ha manifestado su satisfacción porque se van a conservar las 21 hectáreas para uso agrícola y se evitará el impacto visual y medioambiental que acarrearía.

Además, consideran que ya no se tendrá la impresión de «haber subvencionado con fondos públicos una operación puramente financiera que beneficiaría a intereses privados».

Polémica

Si bien desde el principio dejaron claro que no estaban contra la energía solar, el hecho de que una central de este tipo se instalara «en la parcela de cultivo más grande» de Gabadi generó gran polémica entre la población e, incluso, la mayoría municipal y sindicatos agrícolas de diferentes tendencias como ELB y FDSEA se opusieron firmemente al proyecto.

Ahora el colectivo espera que todas las partes implicadas acepten «esta decisión justa y de sentido común» y que la calma vuelva a la localidad.