«El primer partido siempre es más difícil. Cuando juegas en casa en una eliminatoria a tres partidos es una presión enorme», recordaba Dusko Ivanovic tras el choque del viernes ante el Gran Canaria. Un duelo que los suyos se llevarían gracias a los 27 puntos de Teletovic y la defensa de Ribas sobre Carroll.

Liberados de esa presión, los baskonistas afrontan el duelo de «La Roca» con la convicción de finiquitar la eliminatoria, a pesar de ser conscientes de que el Gran Canaria, que causó buena impresión en Zurbano, no se rendirá. Así lo aseguraba al menos Sitapha Savane, alma mater de la escuadra insular.

«El `Granca' nunca se rinde. Ya dio una muestra de fe y buen hacer en Gasteiz. Pese a no hacer nuestro mejor partido, tan sólo perdimos por detalles. Aún tenemos mucho que decir, estamos muy vivos y estoy convencido de que lo demostraremos».

Para Savane el Centro Insular de Deportes -CID- tiene que estar «a reventar. ¡Que ruja el CID!», arengó.