Devil Doll embruja a la audiencia con su sugerente rock and roll sin l�mites
P. CABEZA | BILBO
Nuestro compa�ero Mikel Insausti es un contrastado experto en cine, pero que nadie le lleve la contraria en cuestiones de rock and roll, ya que es un terreno que siempre ha manejado con conocimiento y soltura, por no recordar sus tiempos al frente de bandas como The Covers, The Lusty Men, Big Crunch y Extras, o sus continuos peregrinajes, amplias patillas incluidas, por todo Euskal Herria en busca del mejor rock and roll.
Insausti presenta a Devil Doll: �Es la introductora del burlesque en el rock, adelant�ndose a una moda que la prensa generalista se empe�a en relacionar con el �xito comercial de Imelda May. La prueba est� en que public� su primer disco, �Queen of pain�, en el a�o 2002, donde ya propon�a una fusi�n entre la est�tica pin-up de Betty Page y los sonidos m�s sensuales con base swing en provocativa combinaci�n con la dureza del punk�.
�Imelda May? Pedazo de artista y revitalizadora del rock and roll/swing con curvas, as� que si esta Devil Doll se encuentra a su altura, no es preciso ir m�s arriba, si acaso hasta el auditorio Bastero de Andoain, donde hoy Devil Doll presenta �The return of eve� m�s unas cuantas versiones con gancho. �Compromiso de comuni�n tard�a a finales de mayo? Nada, si alg�n familiar todav�a cree en los almirantes y las princesas, todos y todas a rebautizarse bajo el habitual �fuck you� de Devil Doll, que a nada que se acompa�e de una banda similar a la que ha grabado su reciente disco y ataque canciones de la potencia de �Doreen�, �Gypsy bitch�, �Man in black�, �St Patrick�, �Sweet Lorraine� o �The way you do�, montar� la mejor fiesta posible. Temas donde el rockabilly le saca la lengua al rock and roll, donde el country y el boogie clavan sus espuelas para lograr la mejor carrera de su historia.
Devil Doll es ritmo, pero tambi�n es experta en baladas de corte vaquero donde el fiddle cala hondo. Quiz� sea su disco m�s campero/rock, pero, Colleen Duffy, su nombre de pila, en cualquier caso, no le canta a la luna. Adem�s, al menor descuido, calca un boogie/punk a lo ZZ Top que le deja en solitario al cowboy a la espera de la siguiente diligencia, como ocurre en �The way you do� o �Queen of the road�.