Las industrias del medio ambiente ven el futuro con optimismo
GARA | BILBO
Aclima (Asociación Clúster de Industrias de Medio Ambiente de Euskadi) celebró ayer en Bilbo su asamblea general, en la que se calificó de «duro» el año 2010, ya que la facturación de sus 97 empresas asociadas cayó un 1%, hasta los 1.677 millones.
No obstante, el presidente de Aclima, Juan Luis Moragues, destacó que las previsiones para 2011 apuntan a un crecimiento del 5% y que se espera triplicar el volumen de negocio para el año 2020.
El descenso en el ejercicio 2010 fue «muy acusado» en la consultoría y la ingeniería ambiental, mientras que el volumen de negocio de recicladores -empresas dedicadas a la recuperación de materias primas, especialmente metales-, creció debido a la favorable coyuntura internacional.
El presidente de Aclima destacó el «tremendo incremento» de los precios de las materias primas y la importancia del sector en un momento de crisis, ya que es cuando más necesaria es la eficiencia en la gestión de recursos.
«La clave está en ser capaces de diseñar soluciones específicas para problemas y situaciones concretas, ya que la salida de la crisis ha de conjugar la sostenibilidad y la innovación como claves de la competitividad».
Ecología o pragmatismo
Son las industrias del medio ambiente, según Moragues, las que tienen que ayudar a las demás a ser más eficientes en sus procesos, ya que cuanto más ineficientes sean más residuos generan.
A su juicio, las empresas se están transformando en clave de sostenibilidad no «por unos ideales ecologistas», sino por algo más pragmático como es el usar materias «más eficientes y menos costosas», algo que «reduce costes».
«Las tendencias apuntan a que las tecnologías del medio ambiente y energía son los mercados líderes del futuro», puesto que «la escasez de energía y recursos producirán una gran demanda», insistió.