Tras el anuncio de integración entre las entidades financieras vascas Ipar Kutxa y Bankoa, LAB, sindicato mayoritario en ambas entidades, ha anunciado que ya está dando los primeros pasos para que el proyecto «garantice las condiciones de las plantillas» y «apueste por generar empleo digno».

En una nota de prensa difundida ayer, esta central sindical informa de que ya ha iniciado los contactos con los responsables de Bankoa y también ha solicitado una entrevista con el responsable de Crédit Agricole, Jean Philippe, «como principal sustento económico de la operación», a la vez que presidente en la actualidad de Bankoa.

En la primera reunión con los responsables de Bankoa, los representantes sindicales les han transmitido «la necesidad de información, transparencia y participación» en todo el proceso «como la mejor forma de respetar los derechos de la plantilla, el mejor activo de la operación, y de apostar por modelos consensuados, no impuestos».

A juicio de la central abertzale, «esta operación económica que, no podemos ocultarlo, tiene una visión positiva en clave de país, Euskal Herria, puede y debe servir de ejemplo para generar empleo de calidad y hacer las cosas bien».

«No comprenderíamos -añade LAB- que se apostara exclusivamente por una mera obtención de mayores beneficios y ahorro de costos, sino que debería abordar otros objetivos, entre ellos la generación de empleo digno, así como los planes de futuro sobre expansión o crecimiento, entre otros aspectos».

Para poder llevar adelante todos estos objetivos, LAB ha solicitado que, a la mayor brevedad, se acuerde «un protocolo laboral de fusión que dé tranquilidad a la plantilla y en el que se establezcan algunos principios tales como la no utilización de vías traumáticas ni EREs ni traslados forzosos, respeto a la voluntariedad de la plantilla en todo lo que les pueda afectar e, igualmente, el inicio de un proceso de homologación de condiciones de trabajo» en ambas entidades.

«Acuerdo satisfactorio»

LAB muestra su disposición a abordar todas estas cuestiones, junto al resto de representantes sindicales, con el fin de «llegar a un acuerdo satisfactorio para el conjunto de las plantillas, en favor de la creación de empleo y de un proyecto que tenga a Euskal Herria como principal eje de su actuación».

El sindicato concluye su nota señalando que «quedamos a la espera de comprobar cómo desde las direcciones de las entidades y de quien vaya a liderar el proceso se pasa de las palabras a los hechos y podamos hacer realidad también los objetivos que venimos demandando».

En la actualidad, Ipar Kutxa cuenta con 405 empleados y 91 oficinas repartidas en Bizkaia, Araba, Gipuzkoa, mientras Bankoa tiene 272 empleados y 43 oficinas en Gipuzkoa, Bizkaia, Araba, Nafarroa, La Rioja y Madrid.

Trabajadoras de las subcontratas de limpieza de la Diputación de Araba trasladaron ayer a las Juntas Generales su petición de convenio propio para el colectivo. En Donostia, delegados del sector de limpieza denunciaron el martes el empeoramiento de las condiciones en entidades como Bankinter, Sabadell, Kutxa y Correos.