Varios de los once jóvenes de Iruñerria que serán juzgados en octubre en la Audiencia Nacional española por pertenencia a Segi y otros cinco de Burlata anunciaron ayer una manifestación para el 17 de julio en Iruñea en contra de la persecución judicial a la que se ven sometidos. La petición de cárcel para los once primeros es de diez años a cada uno, mientras que para los otros cinco suma noventa años.

Estos jóvenes se declararon «culpables de denunciar con fuerza este sistema que nos conduce a la miseria, además de hacer frente a los problemas que nos afectan como juventud y de reivindicar nuestros derechos, la independencia y el socialismo para Euskal Herria». Recordaron que varios jóvenes de Donostia están a la espera de conocer sentencia y otros de Oarsoaldea y Algorta tendrán que pasar por el tribunal madrileño en julio y setiembre.

Presión de la ciudadanía

Los convocantes de la manifestación, agrupados en la plataforma ¡Ni un/a joven más!, confían en «construir un muro popular» que acabe con la «barbaridad» que suponen estos juicios y condenas. Por ello, afirmaron «que la política represiva estatal está basada en el odio y la venganza, y no tendrá fin hasta que la ciudadanía le ponga límites, como sucedió claramente en Baiona [el martes], cuando cientos de ciudadanos ejercieron una sólida resistencia en defensa de Aurore Martin».

En la rueda de prensa, los jóvenes colocaron las fotografías de cuatro de sus compañeros que, desde su detención, permanecen en prisión preventiva -en alguno de los casos, este encarcelamiento ya dura 30 meses-. Se trata de Iker Araguas, Irati Mujika, Iñaki Martin e Ibai Azkona. El resto pudo salir en libertad condicional tras abonar 96.000 euros de fianza.

Los cinco jóvenes de Burlata fueron detenidos, incomunicados y denunciaron torturas en 2008. Los otros once, que son vecinos de Iruñea y Barañain, fueron arrestados al año siguiente.

Todos ellos denunciaron que el ministro de Interior ha cumplido con creces la amenaza que lanzó tras la ruptura del anterior proceso. «Rubalcaba amenazó a la izquierda abertzale con más de 300 detenciones. No se quedó corto, pues esa cifra la alcanzaron deteniendo únicamente a jóvenes».