Los sanfermines están al caer y los iruindarras que no se han ido o están preparando las maletas tienen ganas de que el cohete resuene desde lo alto. Desde Errotxapea o asomándose sobre las murallas, ya se puede observar la figura de la noria alzándose por encima del resto de barracas, junto al río Arga. También están en pie los escenarios de la Plaza del Castillo y la plaza de los Fueros, Todas las infraestructuras ya se han desplegado por completo o reciben sus últimos retoques. Sin embargo, aún faltaba por salir a la calle el eje fundamental sobre el que pivotan las fiestas de la capital navarra: la gente sanferminera.

Ayer, los mozos de peñas hicieron su primer gran acto de presencia. Salieron a ritmo de txaranga a eso del mediodía, a la hora del vermú. En el repertorio de canciones no podía faltar el clásico, «La chica yeyé», que si ya era una de las piezas más tocadas otros años, parece que en estas fiestas volverá a estar en el top ten, después de que a principios de año falleciera su compositor, Augusto Algueró, a quien las peñas lloran en la revista que editan una vez al año.

El acto central del día llegó a las 20.00 con la presentación de las pancartas que llevarán las peñas este año. Aunque las viñetas se hicieron públicas hace unos días, ayer fue la primera ocasión en la que se pudieron ver los lienzos reales. De hecho, quizá sea la única vez en la que se puedan contemplar a placer, ya que luego jamás pararán quietas. Una costumbre no escrita marca que quien lleva el palo debe haber bebido lo suficiente como para merecer capitanear la comitiva y guiar a la txaranga.

La exhibición de las pancartas siempre se llena de niños, aunque, en muchas ocasiones, el contenido de la viñeta no resulte precisamente lo más apropiado para un menor. Estos dibujos constituyen un repaso mordaz de todo cuanto ha acontecido en el año en Nafarroa, pero visto desde un prisma de humor, crítica y, sobre todo, desde una perspectiva fiestera. Este año se echan en falta dos clásicos del humor en Nafarroa y que han firmado decenas de pancartas, los viñetistas César Oroz y J.J. Aos. Esto ha dado cancha a Txema Esteban, el otro gran clásico, que firma siete de las 16 pancartas. Aun así, han tenido que sumarse nuevos autores para realizar el catálogo completo.

De un negro luto, al color

La espera para ver los dibujos, en esta ocasión, se ha hecho muy larga, puesto que el año anterior las pancartas se convirtieron en un elemento de protesta por la persecución del Ayuntamiento hacia todo lo popular que aún pervive en las fiestas de Iruñea, concebidas desde el Gobierno como un mero atractivo turístico que se impulsa a golpe de talonario, sin cuidar el espacio que siempre han tenido reservado a la reivindicación y la espontaneidad.

Sin barra en la plaza Santa Ana

Antes de que llegara la primera gran salida de las peñas previa a los sanfermines de 2011, el ambiente se caldeó en Iruñea con música en la plaza Santa Ana, un espacio al que se accede desde la calle Jarauta y que normalmente está cerrado durante el año. Los bailables arrancaron a media tarde desde un pequeño escenario. «Este año no nos han dejado poner una barra. Es de miserables», afirma un mozo de peña. «En la Plaza del Castillo hay un festival de una cadena de radio y todo habrán sido facilidades. Sin embargo, a nosotros este ayuntamiento parece que no nos va a dar ni agua, como el anterior de Yolanda Barcina», denuncia. A falta de un lugar donde beber, la peña Única abrió su local para abastecer a la verbena.

Josu Izquierdo, presidente de la peña Donibane, explica que el Día de las Peñas nació de la necesidad de hacer público el contenido de las pancartas y como un acto popular más previo a la llegada de San Fermín. Sin embargo, «poco a poco ha ido creciendo. Antes se hacía una carrera de goitibeheras y la gente se lanzaba desde Santo Domingo, luego se empezaron a meter bailables y txarangas hasta acabar construyendo lo que ahora tenemos».

Finalmente, Izquierdo reconoce que, en realidad, se trata de una excusa para juntarse todos los que llevan meses trabajando por los sanfermines cada uno en su peña. «La idea es que no aguantamos más y nos apetece hacer una pequeña parranda todos juntos antes de que se tire el cohete, que ya lo tenemos encima», admite con un cubata en la mano. Después de la presentación oficial de las pancartas en la plaza San Francisco, los bailables volvieron a la plaza de Santa Ana. Además, coincidiendo con la celebración y aprovechando que ya en Iruñea empieza a llenarse de gente de cara al miércoles, se organizó otro concierto en la Nabarreria.

El encuentro de las 16 pancartas grandes y las de las peñas txikis se aprovechó para repartir los programas con todas las actuaciones populares que organiza este año la plataforma Gora Iruñea. El folleto incluye información sobre agresiones sexistas. Además, se ha vuelto a habilitar un número de teléfono al que recurrir si alguna mujer se ve envuelta en una situación como esa. El teléfono de denuncia para estos actos es el 699 687 687.

Más allá de las ganas y la necesidad de entonar el cuerpo de cara a los nueve días de fiesta que quedan por delante, el Día de las Peñas se compone de otros pequeños gestos, como el festival de la Casa de la Misericordia, conocida como la Meca. Esta residencia de ancianos pública, que es la que gestiona la plaza de toros durante las fiestas y recauda lo que se saca de las entradas, celebró ayer su festival anual, en el que las 16 peñas llevaron a la Meca una serie de actuaciones musicales para intentar transmitir la ilusión de la llegada de los sanfermines a la gente mayor.

La Pancarta y el Bombo de Oro

En medio de la celebración, la peña Anaitasuna aprovechó para entregar su premio de honor, la pancarta de oro, a Asun Casasola, la madre de Nagore Laffage, que participó el viernes en una charla organizada por las peñas para concienciar sobre las agresiones sexuales durante los sanfermines y en recuerdo de su hija, que murió en los sanfermines de 2008 a manos de un joven de Iruñea. Además de esto, el próximo lunes, a las 20.00 en la Plaza del Castillo habrá una concentración de denuncia y homenaje a Laffage.

Por su parte, la Jarana prefirió esperar a hoy para homenajear a La Pamplonesa con su Bombo de Oro. Igone Aroca, la presidenta de la peña, premiará así la «implicación con la ciudad y sus fiestas» de esta banda de música que lleva ya 91 años poniendo una banda sonora a los sanfermines.