El gasoducto que suministra gas natural de Egipto a Israel y Jordania volvió a ser objeto de un acto de sabotaje ayer, provocando la interrupción de los envíos de gas. Es el tercer ataque contra esta instalación desde el estallido de la revolución egipcia. Fue protagonizado por un grupo armado a bordo de motos a la altura de la ciudad de El Arish, en el Sinaí.