Elecciones al Athletic
Urrutia gana por 2.261 votos a Macua en los comicios con más participación
«El Athletic es una enfermedad contagiosa», dijo Josu Urrutia tras su retirada como «león» hace ocho años. Y a fe que él se ha contagiado. Tras cerrar entonces un periplo de un cuarto de siglo ligado a la disciplina del Club, abre ahora otro nuevo en que presidirá la «gabarra» rojiblanca como el presidente electo con más respaldo de la masa social en la historia de la entidad. 12.057 votos recibió el nuevo mandatario.
Joseba VIVANCO | BILBO
El Newell's Old Boys de la argentina Rosario y el Athletic de Bibao se enfrentaron en San Mamés el 25 de diciembre de 1949 durante una gira europea de los primeros. Por 1-3 (gol de Zarra) se impusieron los visitantes a los Nando, Venancio, Iriondo, Gainza o Canito.
Casi 62 años después de aquel primer y único nexo entre ambos clubes, aquel cordón umbilical se activa ahora con la llegada a la banca rojiblanca de un hincha del equipo de los leprosos, hijo de la misma ciudad Rosario que vio nacer a otro mito argentino como fue Ernesto Ché Guevara. El rosarino Marcelo Bielsa arriba a la capital vizcaina de la mano de otro hombre por cuyas venas también fluye el fútbol como es Josu Urrutia, el ex-capitán rojiblanco que se estrena en la presidencia de la entidad de Ibaigane durante los próximos cuatro años.
A las 21.00 horas, cuando se cerraron las urnas, nadie dudaba ya de la victoria del que fuera mediocampista de San Mamés. Se respiraba en el ambiente -casi se venía palpando desde la mañana- y la necesidad del recuento final parecía cuestión sólo de conocer la diferencia de papeletas obtenidas con respecto a Fernando García Macua. Los dos candidatos y sus planchas habían permanecido casi durante todo el día en Ibaigane, y los rostros de las caras de unos y otros a medida que avanzaba la tarde eran el espejo del alma.
Y en ese espejo se reflejó sobre las 23.00 la sonrisa ladeada de Josu Urrutia, cuando le comunicaron que por fin podrá cumplir su deseo de devolverle al Club de su vida lo que tanto hizo por él, desde aquella primera prueba en Lezama con sólo nueve añitos. El lekeitiarra no sólo ganó ayer, sino que se convirtió en el presidente electo en la historia del Athletic con mayor respaldo social: 12.057 votos frente a los 10.420 que en 2001 había obtenido el malogrado Javier Uria. Macua: 9.796 votos.
Traspaso de poderes
Fernando García Macua -el dirigente que no quería acabar su mandato sin ganar un título-, sin cámaras presentes, cumplió con el ritual de hacer el traspaso de poderes al nuevo presidente. Eran las 23.15 y el gestor, con rostro serio, salía al exterior, flanqueado por su plancha, y entre gritos de «Josu, lehendakari» explicaba a viva voz a los numerosos congregados bajo un pertinaz sirimiri que había «deseado los mayores éxitos» al nuevo presidente, y recalcaba que «ahora todos somos Athletic». Después, entre algunos tímidos gritos de apoyo, abandonaba la que hasta anoche había sido su `casa' durante los últimos cuatro años. Con él, aunque no estaba presente, se iba el técnico andaluz Joaquín Caparrós.
El nuevo inquilino de Ibaigane posaba minutos después en las escalinatas del palacete con la que será su junta directiva, entre gritos y cánticos de decenas de entregados seguidores. Ante ellos, dio repetidamente las gracias -siempre primero en euskera- y, aunque dijo que no era el momento para discursos, sí que les agradeció «esta otra experiencia más, imborrable, alrededor del Athletic».
Se abre una nueva etapa en el Athletic. Ahora, Josu Urrutia y su equipo deberán responder a los requerimientos de soplos de aire fresco que la masa social ha querido para el Club rojiblanco. Una singladura en la que su apuesta por Marcelo Bielsa para el banquillo de la Catedral tendrá mucho que decir.
Dijo una vez el genial mister británico Bill Shankly que «la Santísima Trinidad de un club de fútbol son los jugadores, el entrenador y los aficionados. Los directivos sólo están ahí para firmar los cheques». Pues que la masa social y la afición del Athletic le hagan caso y, a partir de ahora, desde el próximo lunes, que ruede el balón...
Se espera que el técnico argentino llegue mañana a la capital bilbaina, ya que tiene que hacerse cargo del primer equipo el mismo lunes por la mañana en las instalaciones de Lezama.
Con exactitud británica abrieron las puertas de Ibaigane a las 9.00 de la mañana y, como si del encierro de San Fermín se tratara, un aluvión de socios y socias enfiló hacia sus respectivas urnas -veinte en total- para emitir su voto. Bajo un cielo más bien plomizo y envuelta la ceremonia en una enorme expectación médiática, depositaron sus papeletas los primeros votantes, entre ellos, uno de los más madrugadores, el ex-presidente rojiblanco José María Arrate.
Otro que tampoco esperó mucho fue el dirigente del PP Alfonso Basagoiti, acompañado de su hija, enfundada en la camiseta rojiblanca. «Esto es una pasarela, un día muy bonito», resumía el ex-central Andoni Goikoetxea.
Fernando García Macua llegaba sobre las 9.45. En la primera hora ya habían ejercido su derecho 1.047 personas, 249 más que hacía cuatro años, un ritmo que anunciaba lo que iba a ser la jornada. A esa hora, Herri Irratia de Bilbao informaba sobre su primer recuento de la encuesta hecha a pie de calle entre los socios: 53,2% para Urrutia, 46,8% para Macua.
Precisamente, el abogado votaba muy «optimista», según sus palabras, y animaba sonriente a acudir en masa a las urnas. «La encuesta verdadera y la única válida es la de hoy», respondió a los periodistas. Y hasta ahí el fair play, porque parece que éste se quedó fuera del césped de Ibaigane. Apenas quince minutos después -ambos llegaban a cruzarse por primera vez desde hace 40 días- era el otro aspirante, Josu Urrutia, quien se acercaba a votar -premonitoriamente, lo hacía en la sala de juntas de Ibaigane- y sorprendía a todos al denunciar que «en las inmediaciones de Ibaigane se dan sobres para votar a mi candidatura con papeletas de Macua». El ex-capitán insistía en el acoso al socio a las puertas del palacete y que «no ha sido uno, ni dos ni tres, han sido varios los que me han comentado ese caso». Y añadió: «Eso te hace pensar mal».
Denuncia que hizo salir de nuevo a hablar a Macua, que rechazó cualquier `mano negra' y acusó a su rival de «enturbiar el ambiente electoral». Llegó a decir que «hoy no toca hablar de estas cosas».
Con la polémica servida -aunque luego templaron críticas-, a las 11.00 se pasó por Ibaigane para votar el lehendakari Patxi López y para esa hora la cifra de votantes ya era de récord. Casi a mediodía, coincidiendo con la salida del sol en el azul bilbaino, llegó Joaquín Caparrós, que aseguró «se respira Athletic». A la hora de comer, más de 8.000 socios habían desfilado ya por la Avenida de Mazarredo. Y faltaba la tarde.
Ex-futbolistas, políticos, numerosas caras conocidas de la sociedad bilbaina y miles de anónimas fueron peregrinando por Ibaigane en una jornada que respondía a las expectativas y a la llamada a votar en masa de ambos candidatos. A las 17.00, la misma encuesta daba a Urrutia un 58% de votos. Los alrededores de Ibaigane eran un hervidero, el trajín de gente era espectacular y los bares cercanos se asemejaban más a Iruñea que a Bilbo. Una hora antes del cierre electoral ya se había batido el récord de participación. Pocos minutos después de las 21.00 se cerró el plazo. Los recuentos de las urnas, a partir de ahí, caían de uno en uno del lado de ex-león. Antes de las 23.00, oficiosamente comunicaban a Urrutia que era presidente. J.V.
Los jugadores rojiblancos pasan desde ayer reconocimiento médico en la Unidad de Medicina Deportiva del Igualatorio Médico Quirúrgico. Entre ellos, lo completó con el reciente fichaje del Sanse Mikel Orbegozo
«Va a ser una Liga difícil con Málaga, Athletic e incluso Getafe», que «van a intentar engancharse al grupo del Villarreal, Sevilla y Atlético de Madrid, que siempre parten como candidatos a entrar en la Liga de Campeones», ha dicho Unai Emery en su blog
Las elecciones de ayer consiguieron movilizar como nunca a la masa social rojiblanca y es que acudieron a votar 20.999 socios, la cifra más alta de su historia electoral, además de 1.177 papeletas por correo. Todo un éxito participativo.