Madrazo anuncia que deja EB pero no aclara las acusaciones del PNV
Javier Madrazo rompió su silencio y utilizó ayer su blog para anunciar que «en los próximos días solicitaré mi baja en Ezker Batua-Berdeak», para ajustar algunas cuentas internas y para negar «responsabilidades en lo ocurrido en Álava». Pero su texto no aclara un punto fundamental: el PNV dijo que había sido uno de los «interlocutores oficiales» de EB y se le atribuye la primera petición de favores.
Iñaki IRIONDO |
Desde Huelva, donde dice encontrarse de vacaciones, Javier Madrazo anuncia que deja EB. Niega de forma genérica cualquier responsabilidad «en lo ocurrido en Alava» o intentos de «manejar desde la sombra los hilos de una formación política». Buena parte de sus quejas se dirigen contra el otro sector de la coalición. Sin embargo, la cuestión es que Xabier Agirre y el PNV han dicho claramente que Javier Madrazo fue uno de sus «interlocutores oficiales» y ha trascendido que fue de los primeros en pedir favores. Esas acusaciones, pese a lo escrito en su blog, siguen sin respuesta.
En contra de Madrazo juega ahora la evidencia de que los propios implicados han ido reconociendo que Xabier Agirre dijo la verdad cuando desde la tribuna de oradores de las Juntas Generales de Araba denunció que, mientras en una mesa interlocutores de EB negociaban programa, en la «mesa B» había dirigentes que pedían cargos y dinero. El primero en darlo por hecho fue el coordinador general, Mikel Arana (enfrentado con Madrazo), pero luego lo confirmaron Kontxi Bilbao, Serafín Llamas y David Lozano (todos ellos madracistas) aunque cada cual tratara de exculparse a su forma.
Javier Madrazo reconoce que EB es una «organización rota» y dedica buena parte de su escrito a explicar la forma en la que ha ido renunciando a sus puestos en EB tras las autonómicas de 2009. Recuerda, además, que desde entonces vive de su sueldo de profesor de instituto.
En relación a lo ocurrido desde el jueves, señala que se va «con dolor» y que, con sus aciertos y errores, le han «movido en todo momento los valores y principios de EB». Asegura que «quienes quieren imputarme responsabilidades en lo ocurrido en Álava no tienen ninguna razón para hacerlo y lamento que se escuden en este hecho para legitimar la ruptura de EB», Les pide que «deberían ser más responsables y pensar que la división debilita a la izquierda en su conjunto y a las personas que todavía confían en ella».
Luego concluye que a «quien quiera atribuirme otras funciones, le invito a que dedique ocho horas diarias a la enseñanza, dos más al estudio del euskera, pretenda conciliar la vida laboral y familiar, y además maneje desde la sombra los hilos de una formación política. Sería un superhombre, y no es mi caso. Desde hace dos años sólo soy un militante de base de EB, sin funciones ni competencias, digan lo que digan. Desde hoy no seré ya ni eso».
Las conversaciones que desveló el PNV tuvieron lugar a finales de junio y principios de julio, cuando los profesores de instituto están ya de vacaciones. Y las acusaciones de Agirre fueron nominales y directas.
Desde que el jueves Xabier Agirre destapó el escándalo, todos los implicados en las negociaciones A y B han hablado. Sin embargo, las dos junteras, que negaron los hechos y hasta amenazaron con ir a los tribunales, siguen calladas.
Las acusaciones de aprovechar la presencia institucional de EB para favorecer a militantes y amigos con una expansión de los cargos de libre designación y empresas paralelas no son nuevas, y algunas llegaron desde gentes muy cercanas a Javier Madrazo.
La Comisión Permanente de Ezker Batua de Araba se reunirá mañana, en Gasteiz, para pedir explicaciones a los dirigentes de este territorio implicados en la negociación con el PNV y decidir las sanciones o medidas a adoptar contra ellos. Fuentes del partido aclararon ayer a Efe que en esa reunión se decidirá únicamente sobre la actuación del coordinador en Araba, David Lozano, de la portavoz en este territorio, Kontxi Bilbao, y de las dos junteras, Nerea Gálvez y Mertxe Etxezarreta, pero no sobre dirigentes de otros territorios que también pudieron estar implicados en el escándalo.
En este otro caso, es el coordinador de EB, Mikel Arana, quien tiene previsto convocar un consejo político con el objetivo de plantear la solicitud de que el ex coordinador Javier Madrazo y el portavoz de la Presidencia, Serafín Llamas, abandonen el partido, al igual que otros presuntos implicados en la negociación con el PNV. Esta reunión no tiene fecha todavía pero se espera que los expedientes se abran pronto.
El problema para la adopción de medidas disciplinarias es que, de facto, Ezker Batua está partida en dos y cada uno de los sectores tiene sus propios órganos y funcionan en la práctica como dos formaciones paralelas. Mikel Arana, por ejemplo, dijo desde el primer momento que consideraba que las dos junteras alavesas ya no actuaban más que en nombre propio y no representaban a EB, lo que de inmediato fue contradicho por Kontxi Bilbao, que incluso llegó a lanzar graves acusaciones contra Arana, preguntándose en rueda de prensa que «con compañeros así, quién necesita enemigos». GARA