Coincidiendo con la festividad de la Virgen del Carmen, ayer nuevamente militares de la Armada española, acompañados de mandos del Ejército de Tierra, desfilaron por el puerto de Donostia.

A la misma hora, la asociación cultural Herria llamó, bajo el lema «Memoria oinarri... Euskal Herria aurrerantz begira», a un acto en favor de la memoria en el que también participaron la Asociación de Víctimas del Genocidio Franquista y la Fundación Euskal Memoria. Herria considera que el desfile refleja una imagen del pasado y que es «representativo de la imposición política y militar que sufre este pueblo». Teniendo en cuenta la nueva era política abierta en Euskal Herria, mostraron su determinación de no caer «en las provocaciones de los militares» y «mirar adelante».

No obstante, para poder poner la mirada en el futuro es imprescindible, a su entender, establecer una base sólida, que no es otra que mantener viva «la historia del pueblo y la interpretación que hacemos de ella». «Los estados español y francés -criticaron- han escrito la historia desde la imposición, negando la existencia de este pueblo». Ante esta situación, hicieron hincapié en que ya es hora de que los ciudadanos y las ciudadanas de Euskal Herria escriban su propia historia.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Urduña ha declarado -con los votos a favor de Bildu, la abstención del PNV y el voto negativo del PP- el día de mañana como «Día oficial de condena al régimen franquista». La decisión parte de la moción que Ahaztuak 1936-1977 hizo llegar la pasada semana a representantes políticos de un centenar de ayuntamientos vascos.

La Corporación aprobó también realizar un llamamiento a los ciudadanos a colocar en sus balcones ikurriñas o banderas de la II República. «La denominada Ley de símbolos -matizaron- fue el motivo de que no se pudiera acordar el otro punto de la moción de Ahaztuak 1936-1977, que proponía la colocación durante ese día en el ayuntamiento la ikurriña y la bandera tricolor republicana».