«Puedes poner que el siguiente portero de Ondarroa que jugará en el Athletic es Kepa Arrizabalaga», pronosticaba no hace mucho en una entrevista el actual entrenador del Basconia, el ondarrutarra Peio Agirreoa. Para que esa profecía se haga realidad queda aún un largo camino y es que el joven cancerbero al que se refería sólo tiene 16 años.

Lo que seguro que no pensaba este chaval de 1,81 m. de altura y aficionado desde muy pequeño a la cría de pájaros cantores -suele arrasar en el campeonato vizcaino que organiza el Café Iruñea-, es que estos días iba a estar ejercitándose en La Oliva (Valencia) con el primer equipo.

Kepa Arrizabalaga es uno de los cuatro «leoncitos» del Athletic -como llamó a los jóvenes canteranos Marcelo Bielsa- que realizan la pretemporada tratando de convencer al nuevo técnico de que pueden tener un hueco en el plantel o, al menos, que cuando el argentino eche la vista a la cantera, tenga referencias de las que echar mano.

El jovencísimo arquero no es la primera vez que se estrena con los mayores. Joaquín Caparrós ya lo convocó en marzo pasado para un amistoso contra el Aurrera de Vitoria, pero no llegó a jugar. Sí fue titular de la selección de Euskadi campeona del Estatal sub-18 en abril pasado.

Otra de las presencias en tierras levantinas que llama la atención del aficionado menos ducho en la cantera de Lezama es la del delantero bilbaino Guillermo Fernández, de 18 años y 1,78 m. de altura.

El 22 de marzo de 2010 debutó con el Bilbao Athletic debido a las bajas en los puestos de ataque del filial. Jugó apenas trece minutos, pero lo suyo esa temporada parecía una carrera meteórica. Comenzó ese curso en el juvenil de Liga Nacional, en noviembre dio el salto al de División de Honor y al final de temporada jugó con el filial, con el que anotó el tanto que supuso la victoria en la penúltima jornada y certificó la permanencia en Segunda B. Incluso sabe lo que es jugar con el primer equipo, en un amistoso en Leioa donde anotó dos goles. Y muchos le conocerán por sus dos goles al Barça juvenil en Lezama en mayo pasado, en presencia de unas 4.000 personas.

Ya estuvo en la pretemporada de Isla Canela con Caparrós el año pasado. «Es un delantero muy listo dentro del área, donde ejecuta muy buenos movimientos», ha dicho de él Jabo Irureta, un jugador «con gol», que la pasada campaña participó en 15 partidos con el filial rojiblanco y marcó tres goles; jugó también cinco con el juvenil en Liga, con un tanto marcado.

Y falta Jonás Ramalho

Los otros dos `cachorros' integrantes de la expedición son más conocidos. Se trata de una de las perlas actuales de Lezama, el joven centrocampista eibartarra Iñigo Ruiz de Galarreta, que cumplirá 18 años en agosto, y el estilizado -1,86 m.- lateral izquierdo Enric Saborit, que puede desenvolverse también en la posición de interior.

Este último, de 19 años y natural de Barcelona, aunque de madre vasca, fue centro de la polémica en 2008 cuando el Athletic decidió ficharlo de la cantera del Espanyol, por hilarse muy fino al respetar la filosofía del club. «Es un jugador de banda con buenos fundamentos, con un carácter más ofensivo que defensivo», le retrató Irureta. Esta campaña ha sido internacional sub´18 y 19. Jugó 26 encuentros con el filial y anotó 3 goles.

Lo que sí es más probable es que a estos cuatro `leoncitos' se sumen más adelante los defensores Jonás Ramalho y Jon Aurtenetxe, concentrados para disputar el Europeo sub'19 que comienza el día 20 en Rumanía.