copa américa
Uruguay acrecienta su merecida fama de agriar la fiesta a los anfitriones
GARA | IRUÑEA
Tras el famoso Maracanazo, Uruguay volvió a demostrar en la Copa América 2011 que se le dan bien los anfitriones, como ya ocurriera en 1999 cuando dejó en la cuneta a Paraguay, o en 2007 al hacer lo mismo frente a Venezuela.
En esta ocasión, el trago amargo le tocó a Argentina, organizadora del torneo y una de las principales favoritas, junto a Brasil. Los liderados por Messi se quedaron en cuartos tras finalizar con empate a uno frente a los charrúas en el tiempo reglamentario y caer en los penaltis, gracias a que el cancerbero recién fichado por el Galatasaray y curiosamente nacido en Buenos Aires, Fernando Muslera, le detuviese su lanzamiento al Apache Tévez.
Lo cierto es que el combinado albiceleste se estaba ganando a pulso el descalabro, tras una primera fase muy irregular, con una pléyade de figuras sin dar el rendimiento esperado ante su propia afición hasta ese momento. La Pulga y compañía sí que dieron una mejor imagen de sus posibilidades ante los charrúas, pero ya cuando su equipo fue por detrás y sin terminar de rematar la faena.
Ahora los uruguayos se medirán en semifinales a Perú, una de las sorpresas de este torneo y que dejó en la cuneta a Colombia. Lobatón y Vargas -uno de los futbolistas de moda- rompieron el partido en la prórroga y penaron la falta de acierto colombiana, manifestada en su máxima expresión en el penalti marrado por Falcao en el minuto 65, un lance decisivo.
El encuentro entre Uruguay y Perú será especial para el técnico de los segundos, Sergio Markarián, uruguayo de nacimiento y armenio de origen. El veterano entrenador ha devuelto a lo más alto al fútbol peruano y, porqué no, hacer soñar a todo un país con repetir las hazañas de 1939 y 1975.
Por su parte, al cierre de esta edición, el duelo entre Brasil y Paraguay por acceder a otra plaza para la semifinales se mantuvo con el marcador inicial de cero a cero, incluida la media hora de prórroga, y el pase se estaba disputando en la tanda de penaltis.